Técnicos de MiAmbiente atendieron la situación.
Moradores de la comunidad de La Represa en La Chorrera, manifestaron sus molestias por la considerable cantidad de desperdicios de cerdo, en el cauce del río Caño Quebrado Abajo, realizado por alguna empresa del área.
Señalaron que no es la primera vez que se da esta práctica en otros predios cercanos al río, en donde todavía quedan restos de cajas, bolsas negras y olores desagradables, lo que se presume como un vertedero clandestino, ya que realizan esa tarea en horas nocturnas.
Edgar Murillo, técnico de Sección de Verificación del Desempeño Ambiental de MiAmbiente, encabezó una inspección y habló con personas de la comunidad y las autoridades locales.
En la intervención, los moradores aseguraron que por lo pronto voluntariamente limpiaran el balneario que representa un lugar de esparcimiento y área turística muy visitada.
“Levantaremos un informe técnico y seguiremos monitoreando el área para acumular pruebas que sumadas a las de la comunidad y las autoridades locales, nos permita deslindar responsabilidades, enmarcadas en legislaciones ambientales vigentes”, manifestó el funcionario, al tiempo que exhortó a la comunidad a organizarse para cuidar su entorno y los recursos naturales, como es este río que no está contaminado, puntualizó.