Han transcurrido nueve décadas desde la primera emisora instalada y manejada por panameños, pese a las restricciones existentes por las relaciones con los Estados Unidos en aquella época, que solo sepermitía la operación en radio emisoras a ciudadanos estadounidenses.
El domingo venidero se le rinde homenaje al medio más noble de la comunicación y, por ende, a quienes están al frente de él y lo hacen posible. El segundo domingo de junio está dedicado a reconocer el servicio que brinda “La Radio” como también a los locutores.
Han transcurrido nueve décadas desde la primera emisora instalada y manejada por panameños, pese a las restricciones existentes por las relaciones con los Estados Unidos en aquella época, que solo se permitía la operación en radio emisoras a ciudadanos estadounidenses y es así como por el año 1927 se instaló la primera radioemisora.
Luego, por allá por el año 1931, la emisora Tropical Radio, subsidiaria de la United Fruit Company. Y de allí (1933) se inició la historia de la radio en Panamá, al principio por la inquietud de ingenieros especialistas en aquellas disciplinas.
En tiempos modernos y de mucha tecnología, la radio ha sufrido una transformación igual que quienes están al frente de ese medio. Se requiere el uso de las nuevas herramientas para mantenerlo. Sin embargo, podemos afirmar que la radio y su gente no desaparecerá, debido a la característica de su estructura.
Llega a lugares donde no hay redes sociales, web, internet. Aunque los mismos equipos receptores de esas señales, vayan cambiando por la necesidad del mercado, pero allí hay radio y detrás de cada programa existe un locutor.
La radio nació con propósitos muy específicos desde: informar, educar, entretener y todos los que surjan y sean necesarios entre el emisor y el receptor, eso es así. Es aún vehículo de información que también requiere cumplir con los objetivos de su creador.
La superación dada a través de la radio, desde los programas de educación en casa, mejorando la alfabetización y el apoyo que a través de sus programas diversos brinda a los oyentes, es un tema que permitirá que permitirá que este medio no desaparezca, se transforma.
Le pregunté AI a través de Bing cuál es el futuro de la difusión y esto fueron algunos de los puntos que me respondió: “La transición a la radiodifusión digital terrestre, que puede ofrecer más calidad, diversidad y eficiencia en el uso del espectro”
“La integración de la capacidad del protocolo Internet en las tecnologías de radiodifusión terrenal, que puede permitir el acceso, la creación de contenidos y la distribución de banda ancha”
“La radio satelital, que puede proporcionar una programación libre de comerciales y sin censura a los oyentes que pagan una cuota mensual” y, en fin: “La radiodifusión pública, que puede facilitar importantes aplicaciones de alerta en caso de emergencia y promover la educación y la cultura” y así sucesivamente hasta indicar que: “La competencia y el pluralismo en el sistema de radiodifusión, que pueden garantizar la libertad de expresión y la diversidad de opiniones”
Al fijar en Panamá, el segundo domingo de junio como el día dedicado a honrar el trabajo que hacen hombres y mujeres tras una consola de radio y que se constituyen en locutores de radioemisoras, es propicia la ocasión para dedicarle la reflexión sincera, porque también, a través de ese trabajo que se desconoce cómo se hace y cómo se realiza, se construye la patria y se hacen amigos que sin conocerse se escuchan por medio de esas ondas hertzianas y que entretienen, educan e informan.
Saludos a todos los trabajadores y trabajadoras de la radio en su día y que esta actividad tendrá su futuro, porque el medio seguirá entre los radioescuchas.