En Puerto Príncipe, el jefe de la ONU reiterará el respaldo de la organización y pedirá ayuda humanitaria
El secretario general de la ONU, António Guterres, llegó este sábado a la capital de Haití para una visita en la que se reunirá con su primer ministro, Ariel Henry, y reclamará el apoyo de la comunidad internacional al país en la grave crisis que atraviesa, según informó la organización.
Guterres aterrizó hoy en Puerto Príncipe, ciudad asolada en su mayor parte por bandas violentas, “para expresar solidaridad con el pueblo haitiano, que está atravesando un trágico ciclo de crisis de seguridad, políticas y humanitarias”, indica una nota breve de la ONU.
En su cuenta de Twitter, el diplomático dijo que “no es momento de olvidar a Haití” y sostuvo que quiere “llamar a la comunidad internacional a seguir apoyando a Haití, incluyendo con una fuerza internacional robusta que asista a la Policía Nacional Haitiana”, que sigue bloqueada tras meses.
Durante la visita, de la que no se ha especificado duración, el secretario general se reunirá con el primer ministro Henry “y escuchará de líderes de varios partidos políticos, del Alto Consejo de Transición, de miembros de la sociedad civil y de personal de la ONU”, agrega la nota.
En Puerto Príncipe, el jefe de la ONU reiterará el respaldo de la organización y pedirá ayuda humanitaria y “el despliegue inmediato de una fuerza internacional para asistir a la Policía Nacional Haitiana”, que los expertos humanitarios consideran necesaria para restablecer la libertad de circulación de la población.
El Gobierno haitiano solicitó ese apoyo el pasado octubre y la Secretaría General de la ONU propuso inmediatamente al Consejo de Seguridad el envío de un contingente con personal de uno o varios países.
Pero ese envío sigue sin hacerse realidad, pese a que los miembros del Consejo de Seguridad en general se han mostrado favorables a la operación, que no se haría bajo bandera de Naciones Unidas por el mal recuerdo que dejaron en Haití los “cascos azules”.
Guterres “también subrayará la necesidad de un camino político liderado por los haitianos e inclusivo hacia unas elecciones y un retorno al orden constitucional en Haití”, concluye la nota.
Los asesinatos, violaciones y secuestros se han convertido en zonas de Haití en algo prácticamente continuo, según la ONU, que recientemente alertó de que -ante la incapacidad de las autoridades- algunos civiles “han empezado a intentar resolver los asuntos por sus propias manos”.