Entre los últimos datos conocidos, la economía estadounidense registró en el segundo trimestre del año un crecimiento del 0,6 %
Wall Street cerró julio con avances en sus principales indicadores gracias a unos resultados trimestrales mejores de lo esperado y más señales de enfriamiento de la inflación en EE.UU., que han generado expectativas de que las subidas de los tipos de interés terminen pronto.
El más beneficiado ha sido el índice Nasdaq, en el que cotizan las tecnológicas más grandes, que acumula un 4,1 % de ganancias y encadena su quinto mes en verde, mientras que el selectivo S&P 500, con un progreso del 3,1 %, también logra su quinto mes seguido en positivo.
El Dow Jones de Industriales suma un 3,4 % en julio, impulsado en parte por una racha alcista de 13 sesiones consecutivas que se rompió la semana pasada, pero que ha dejado titulares porque es la más larga registrada desde 1987.
En el punto de mira ha estado la temporada de resultados del segundo trimestre, en la que han reportado solo la mitad de cotizadas del S&P 500, si bien la amplia mayoría superan las estimaciones de beneficios y facturación, de acuerdo con FactSet, lo que ha animado al mercado.
“Parte de la razón por la que el mercado ha subido todo el mes es que, además de las buenas noticias para la economía que hemos visto todo el año, estamos viendo que los resultados corporativos realmente parecen no haber recibido tanto impacto como se temía”, dijo al portal CNBC el analista Chris Zacarelli, de Independent Advisor Alliance.
Entre los últimos datos conocidos, la economía estadounidense registró en el segundo trimestre del año un crecimiento del 0,6 % con respecto al trimestre anterior, y su ritmo de crecimiento anual entre abril y junio fue del 2,4 %, lo que refleja su resiliencia.
Todo ello pese a la campaña de política monetaria agresiva de la Reserva Federal (Fed) para controlar la inflación, que sigue bajando, con la última prueba de ello en el índice de precios de los gastos de consumo personal, que se incrementó un 4,1 % anual, su menor medida desde finales de 2021.
Mientras tanto, tras hacer una pausa en junio, la Fed subió los tipos de interés en 0,25 puntos porcentuales, de manera que ahora se sitúan en su nivel más alto desde 2001, en una horquilla de entre el 5,25 % y el 5,5 %.
Su presidente, Jerome Powell, aseguró que queda camino para llevar la inflación a la meta del 2 % y dijo que el banco central evaluará nuevas subidas según los datos disponibles, pero destacó que el personal de la Fed ya no augura una recesión.
En otros mercados, el petróleo de Texas cierra julio por encima de los 81 dólares (73 euros al cambio de hoy) el barril tras una subida acumulada del 16 % en su valor, por las expectativas respecto a la próxima reunión de la OPEP+, las previsiones de demanda y los recortes de producción de Arabia Saudí.