Este trabajo pone de manifiesto que los pollos de cigüeña alimentados con comida procedente de los vertederos presentan, de forma general, un mejor estado nutricional y una mejor condición física que los pollos que son alimentados con alimentos hallados en el medio natural.
Un estudio científico multidisciplinar ha puesto de manifiesto que los pollos de la cigüeña blanca (Ciconia ciconia), alimentados con comida procedente de los vertederos urbanos, tienen mejor estado nutricional que los que son alimentados con alimentos más naturales.
Según han dado a conocer este lunes los autores de esta investigación, existe un extenso número de especies animales que utilizan los vertederos como fuente de alimento, entre los que destaca la cigüeña blanca y, tanto es así que, tras su descenso poblacional a mediados del siglo XX por la alteración de su hábitat natural, esta especie se ha recuperado gracias al uso de esta nueva fuente de alimento.
Hasta ahora, existía poca información con respecto al posible impacto directo de este comportamiento sobre el estado de salud de los individuos.
Un equipo multidisciplinar compuesto por investigadores de la Universidad de Lund (Suecia), el Grupo de Investigación en Sanidad y Biotecnología (SaBio) del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC – CSIC, UCLM, Junta de Comunidades), la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y SEO Birdlife, ha evaluado el efecto potencial del uso de los vertederos como fuente de alimentación sobre el estado de pollos de cigüeña blanca, y se ha centrado en la evaluación del estado nutricional y el balance oxidante, este último por ser muy sensible a la calidad de la dieta y la presencia de tóxicos.
Para este estudio se tomaron muestras de pollos de cigüeña de 10 colonias distintas, localizadas en Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura y Madrid.
Para demostrar que el uso de vertederos como fuentes de alimento por la cigüeña blanca, está directamente relacionado con la distancia a estos, los investigadores han usado dicha distancia como indicador del uso, teniendo una colonia un 100% del uso, otra un 0% y las otras 8 con proporciones distintas de uso intermedias.
Algunas de estas colonias fueron muestreadas en dos años consecutivos, para determinar si la tendencia observada se mantenía en el tiempo.
Los resultados han revelado que el estado nutricional de los pollos de cigüeña blanca alimentados con comida procedente de vertedero es mejor, independientemente del año de estudio, con valores más altos de colesterol, triglicéridos y urea, lo que sugiere una mayor tasa de alimentación.
Además, valores más altos de colesterol HDL (el conocido como “colesterol bueno”) demuestran que el estado nutricional es mejor cuanto mayor es el uso del vertedero.
Sin embargo, la relación entre el uso de vertedero como fuente de alimento y el balance oxidante no es tan clara.
Por un lado, se encontraron diferencias entre años, ya que se ha observado que los pollos nacidos en 2014 tuvieron mayores valores de diversos antioxidantes como la vitamina E y los carotenoides luteína y zeaxantina, y menores de LDH (indicador de daño oxidativo) que los nacidos en 2013.
Este trabajo pone de manifiesto que los pollos de cigüeña alimentados con comida procedente de los vertederos presentan, de forma general, un mejor estado nutricional y una mejor condición física que los pollos que son alimentados con alimentos hallados en el medio natural.