La industria maderera chilena aporta entre 2 y 3% al PIB nacional, de acuerdo a un informe de la Corporación Chilena de Madera (CORMA). Del 8 al 10% de los ingresos chilenos exportados en la última década, provienen de la industria maderera.
Como un actor destacado en el mercado internacional, impulsando su presencia de manera innovadora y sostenible, se consolida la industria maderera chilena, reconocida por su arraigada tradición en la producción de madera de alta calidad
Chile, con su oferta diversa que abarca desde maderas finas hasta productos derivados, se erige como un socio estratégico en respuesta a las crecientes demandas del mercado global.
El informe de la Corporación Chilena de Madera (CORMA) reveló que la industria maderera contribuye significativamente al PIB, aportando entre un 2 y 3%. Además, durante la última década, del 8 al 10% de los ingresos exportados provienen de esta industria, evidenciando su impacto económico positivo.
Un ejemplo de estos fuertes lazos comerciales es la relación con Panamá, país al que Chile ha exportado madera desde 2013. Cabe resaltar que, el país centroamericano se posicionó en 2021 como el segundo mayor exportador de Centroamérica con $26 millones, según dador de CentralAmericaData.
Las prácticas innovadoras de la industria chilena han fortalecido esta alianza, haciendo de Panamá uno de los aliados más importantes para la industria maderera chilena.
En 2021, las exportaciones forestales-maderas de Chile alcanzaron un total de 581 millones de dólares, marcando un aumento del 31% respecto al año anterior, según CORMA. Entre los productos exportados se encuentran pulpa química, madera aserrada, molduras, tableros y chapas.
Con más de 120 mercados en todo el mundo, el gremio está conformado por 170 empresas comprometidas con el cultivo y manejo sustentable de bosques. Por su parte, Chile posee 17 millones de hectáreas de recursos forestales, que equivalen al 23,7% de la superficie total del país. El 86% corresponde a bosques nativos (14,6 millones de hectáreas) y un 14% a plantaciones forestales (2,4 millones de hectáreas).
“Chile cuenta con una oferta reconocida internacionalmente, con un 70% de los bosques productivos certificados, por encima del 30% promedio a nivel mundial. La certificación forestal garantiza la competitividad y la diferenciación de nuestra oferta exportable. Ya que desde finales de los 90’s se han implementado en Chile exigentes sistemas de certificación en manejo forestal sostenible a través de entidades mundialmente reconocidas, como son los sellos PEFC y FSC”, explicó Carlos Rivas, director Comercial de ProChile en Panamá.
Del total de madera en trozos producida en Chile, un 36% se destina a la producción de pulpa de madera para la industria de celulosa y papel; un 34,7% a la industria del aserrío; un 16,1% para astillas de exportación y un 10,4% a la producción de tableros y chapas. El volumen restante se destina a otros usos como, por ejemplo, postes y polines impregnados.
Además, Chile no solo destaca como exportador de productos madereros, sino también como proveedor de servicios forestales a mercados internacionales.
Maquinarias, equipos forestales y para aserrío, así como remanufacturas, son productos que Chile ofrece con un alto nivel de innovación tecnológica, captando la atención en el nuevo mundo.