La protesta de hoy se saldo con una tibia convocatoria y sin incidentes
El gobierno del ultraderechista Javier Milei amenazó con quitar el plan social estatal a quienes se movilicen en una clara advertencia para frenar las protestas durante su mandato.
A través de mensajes difundidos en pantallas de video y por altavoz en trenes y estaciones de Buenos Aires, se advirtió hoy que quienes bloquen las calles durante manifestaciones se enfrentan a la pérdida de beneficios sociales.
“El que corta no cobra” fue el mensaje desplegado en grandes pantallas en las estaciones de la capital de Argentina, un país donde el 40% de la población es pobre.
Además, hubo controles policiales “preventivos” en estaciones y en algunos accesos a la capital argentina, en línea con un nuevo protocolo de seguridad que prohíbe los bloqueos de las vías públicas.
Las protestas sólo podrán hacerse sobre las veredas (aceras) y las fuerzas de seguridad aplicadas al operativo podrán portar armas de fuego, un protocolo que fue rechazado por las organizaciones sociales.
Según el diario Página12, Milei anunciará en cadena nacional el decreto de necesidad y urgencia (DNU) mediante el cual instrumentará su “desregulación económica”.
Se trata de alrededor de 600 artículos que según el gobierno no necesitan pasar por el Congreso. Incluye reformas contra derechos de los trabajadores, la derogación de la ley de alquileres y la posibilidad de privatizar empresas del Estado.
En medio de las advertencias del ultraderechista, la protesta de hoy se saldo con una tibia convocatoria y sin incidentes.
Según constató EFE, los manifestantes comenzaron a desmovilizarse tras dos horas de protesta en el centro de Buenos Aires en una jornada que convocó a muchos menos de los 50,000 previstos inicialmente.
Pese a que marcharon de forma pacífica, muchos de los manifestantes incumplieron las medidas establecidas en un protocolo de seguridad que prohíbe cortar el tránsito en las calles y carreteras.
“Esto es una dictadura militar”, declaró a la prensa Eduardo Belliboni, líder del Polo Obrero, una de las organizaciones convocantes de la marcha de este miércoles, que coincidió con el día en que se conmemora del 22° aniversario de las violentas protestas que en 2001 se saldaron con 39 muertos y la renuncia del entonces presidente, el radical Fernando de la Rúa (1999-2001).