Portavoz ruso aseguró que su país no tiene planes de atacar a los países de la OTAN
Las maniobras Steadfast Defender, organizadas por la OTAN, no solo “aumentan el riesgo de incidentes militares”, sino que pueden tener “consecuencias trágicas para Europa”, advirtió la portavoz de la diplomacia rusa, María Zajárova.
“Durante varios meses, un grupo de 90,000 efectivos de 31 países miembros de la OTAN, más Suecia, operará activamente cerca de las fronteras rusas en un territorio que se extiende desde Noruega hasta Rumanía”, afirmó. A la vez, señaló que Rusia “no tiene planes de atacar a los países de la OTAN”.
Poco después del inicio de los ejercicios militares de la OTAN, el dictador ruso, Vladímir Putin, viajó a Kaliningrado, ubicado entre Polonia y Lituania. Su portavoz, Dmitri Peskov, negó que el viaje fuese un “mensaje” a la Alianza Atlántica.
Los ejercicios de la OTAN, que se extenderán hasta el mes de mayo, se desarrollarán principalmente en el flanco oriental de la Alianza.
El ejercicio está diseñado para simular la respuesta de la Alianza de 31 naciones a un ataque de un rival como Rusia. Incluirá ejercicios paralelos localizados y se extenderá desde América del Norte hasta el flanco oriental de la OTAN, cerca de la frontera rusa.
Participarán de los ejercicios militares 90,000 soldados, 50 buques de guerra, 80 aviones y más de 1,100 vehículos de combate. Se trata de las mayores maniobras de la OTAN desde el ejercicio Reforger de 1988, en las postrimerías de la Guerra Fría.