La mayoría busca evadir la justicia por investigaciones de presuntos casos de corrupción
El expresidente Ricardo Martinelli se sumó a la larga lista de políticos latinoamericanos que han encontrado en el asilo un ‘pase’ para evadir la Justicia o en el mejor de los casos para salvaguardar su vida, según publicó EFE.
Este miércoles, el régimen de Daniel Ortega comunicó a Panamá que otorgó asilo a Martinelli, a quien la justicia panameña condenó a 128 meses de prisión por blanqueo de capitales en la compra de los rotativos de EPASA.
Yo fui Presidente de Panamá durante 5 años y durante ese tiempo conocí mucha gente e hice muchos amigos. @soyfdelrincon el Presidente Daniel Ortega y su esposa la Primera Dama Doña Rosario Murillo me une una excelente amistad hoy en día y lo serán toda la vida. pic.twitter.com/CK2peq3lDM
— Ricardo Martinelli (@rmartinelli) February 8, 2024
Bajo el paraguas de Ortega también se encuentran los expresidentes de El Salvador Mauricio Funes (2009-2014) y Salvador Sánchez Cerén (2014-2019), ambos considerados prófugos de la Justicia de su país y a quienes Ortega les concedió la nacionalidad nicaragüense.
En noviembre de 2018, el exgobernante peruano Alan García (1985-1990 y 2006-2011), que era investigado por los presuntos delitos de colusión agravada y lavado de activos en el caso de los sobornos de Odebrecht, pidió asilo a Uruguay, el cual le fue negado por ese país. Anteriormente, había estado asilado en Colombia desde 1992.
En 2022, el entonces presidente de Perú, Pedro Castillo, fue detenido cuando se dirigía a la embajada de México con su esposa y sus hijos. Sus familiares sí lograron llegar a la representación diplomática y luego recibieron el asilo del gobierno mexicano.
Gustavo Noboa, padre del actual presidente de Ecuador, Daniel Noboa, permaneció asilado en República Dominicana, entre 2003 y 2005. En tanto, el expresidente ecuatoriano Lucio Gutiérrez (2003-2005), se asiló en Brasil, Perú y Colombia, hasta que en 2005 volvió a Ecuador y fue encarcelado por sedición y posteriormente la causa fue sobreseída.
En 2009, Perú acogió a tres exministros bolivianos acusados en su país de genocidio en las protestas de 2003. El excandidato presidencial venezolano Manuel Rosales estuvo asilado en Perú desde 2009 hasta 2015.
En 2011, el exgobernador boliviano Mario Cossío recibió el estatuto de refugiado en Paraguay, país al que llegó huyendo de lo que calificó como una “persecución política” por parte de Evo Morales.
Otro de los asilados es el exvicepresidente de Ecuador Jorge Glas (2013-2018) que en diciembre pasado pidió asilo a México, luego de ingresar a la embajada de ese país en Quito, donde permanece en calidad de “huésped”.
Mientras que en Colombia está desde 2002 Pedro Carmona.