Más de 400 detenidos en protestas contra el régimen ruso por la muerte en la cárcel de Navalni, el principal opositor de Putin
“Putin lo mató”, denunció el equipo del fallecido opositor ruso, Alexei Navalni, después de que su madre recibió este sábado el certificado de defunción de manos de los funcionarios de prisiones, informó la agencia EFE.
Las protestas de condena contra el régimen de Putin por la muerte de Navalni, se han reproducido desde el viernes en unas 40 ciudades rusas, en las que han sido detenidas más de 400 personas.
Son muchos los rusos que han salido a los actos de homenaje a #Naválny. Pero son muchos más los que permanecen en sus casas en #shock, conscientes del mensaje del régimen: desde ahora cualquier conato de protesta va a tener un castigo inmediato y desproporcionado. pic.twitter.com/OYksmqdVIU
— Antonio Airapétov (@PereTrad) February 18, 2024
La organización no gubernamental rusa OVD-Info, que vela por los derechos, dijo que la mitad de las detenciones se produjeron en San Petersburgo, ciudad natal de Putin.
La prensa local publicó imágenes de cientos de personas levantando memoriales en el que depositan flores y velas para homenajear al líder opositor muerto en circunstancias aún no esclarecidas.
“Los familiares y el abogado de Navalni recibieron la confirmación oficial sobre la muerte de Alexei. Putin lo mató”, escribió Kira Yarmysh, portavoz del opositor, en su cuenta de la red social X.
Yarmysh precisó que el opositor falleció a las 2:17 pm del viernes, dos horas antes de que los servicios penitenciarios lo anunciaran públicamente.
La portavoz añadió: “Exigimos que el cuerpo de Alexei Navalni sea entregado inmediatamente a su familia”.
La madre, Liudmila Naválnaya, llegó el sábado a la prisión ártica en la que murió súbitamente su hijo, aunque sus correligionarios y las cancillerías occidentales acusan al Kremlin de asesinato.
Radio Liberty informó que Naválnaya voló desde Moscú a la ciudad de Salejard, en el distrito autónomo Yamalo-Nénets.
Seguidamente, la madre se desplazó en automóvil a la localidad de Jarp, donde se encuentra la cárcel IK-3, conocida como Lobo solitario, a la que fue trasladado su hijo en diciembre pasado.
Naválnaya, quien aseguró que no quiere recibir condolencias, se había reunido en ese mismo lugar con Navalni, de 47 años, el pasado 12 de febrero. “Estaba sano y contento de estar vivo”, escribió la progenitora del político en Facebook.
La oposición y la prensa independiente rusa, y las cancillerías occidentales acusaron al unísono al líder ruso de ordenar el asesinato de Navalni, enemigo número uno del Kremlin desde hace 15 años.
Navalni, que cumplía una condena de casi 30 años de cárcel, fue trasladado a la nueva penitenciaría después de anunciar una campaña contra la reelección de Putin en los comicios presidenciales del 17 de marzo próximo.