UNICEF criticó la decisión y comentó que espera que el Estado panameño pueda satisfacer las necesidades humanitarias de los migrantes
Con preocupación observan organizaciones y comunidades religiosas católica agrupadas en la Red Clamor, la salida de Panamá de Médicos Sin Fronteras (MSF) que realizaban una labor humanitaria con migrantes en Darién.
En un comunicado, la red religiosa rechazó los señalamientos de las autoridades panameñas hacia la organización.
Este fin de semana, la directora del Servicio Nacional de Migración (SNM), Samira Gozaine, acusó a MSF de fomentar la migración irregular al darles mapas a migrantes en Colombia.
La directora de @migracionpanama Samira Gozaine afirmó que existen reportes, que organismos internacionales otorgan mapas a migrantes en Colombia, de cómo cruzar la selva de Darién, sin importar el peligro que representa para los niños. #PanamaEnDirecto pic.twitter.com/vHkxgDWFxx
— Panamá En Directo (@panamaendirecto) March 10, 2024
“Los criminales son los que abusan, violentan la vida y promueven la trata de personas, los que se aprovechan de la necesidad de la población migrante y vulnerada”, subrayó la red religiosa.
La Red Clamor también rechaza de plano, la postura asumida por el gobierno, que consideran la crisis migratoria como seguridad nacional y no como un tema humanitario.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) se sumó al respaldo a MSF y lamentó la suspensión de sus servicios, según informó el diario La Estrella.
“Cada vez que sale una organización es preocupante, porque se requiere para responder por las necesidades de la población y esperamos que el Estado panameño pueda satisfacer esas necesidades”, dijo Margarita Sánchez, especialista en protección infantil del UNICEF.
Sánchez dijo que le preocupa la salida de MSF, porque en este año se incrementó el ingreso de los migrantes. En solo dos meses y medio, han ingresado 82,360 migrantes por Darién.
La diferencia entre MSF y el gobierno, surge luego que el organismo internacional sanitario, denunciara 233 casos de violaciones sexuales contra migrantes en las cinco primeras semanas de este año.
Según MSF, solo una semana de febrero atendieron 113 casos de agresión sexual. En todo enero atendieron 120 casos.
Como represalia el Ministerio de Salud (MINSA), ordenó el 7 de marzo la suspensión de sus actividades humanitarias en Darién.
El MINSA amenazó a la organización con investigar si habían cumplido con las normas establecidas en el país y estipuladas del convenio de colaboración.
Añadió que debieron de notificar el historial clínico de los pacientes para darle seguimiento a los casos denunciados.
A pesar que, la organización no gubernamental mostró su interés de retomar la atención en el Darién, el MINSA cortó esa posibilidad respondiendo que ya trabaja con otros organismos internacionales no gubernamentales para brindar atención en la frontera colombo panameña.
MSF lleva prestando servicios desde el 2021 a los migrantes en Darién.
De acuerdo con esa organización, cada mes sus equipos médicos brindaban atención en salud física y psicológica a casi 5.000 personas, con un especial énfasis en las sobrevivientes de violencia sexual.