Apunta a “los chantajes ilegales” y a la “acumulación de ganancias ilícitas” del trasiego de migrantes
El papa Francisco puso el dedo en el “tráfico humano” a través de Darién que se vale de “chantajes ilegales” para acumular “ganancias ilícitas”, y pidió a los obispos de Colombia, Costa Rica y Panamá “sumar esfuerzos con todas las instancias de la comunidad internacional” en defensa de los derechos de los migrantes, informó la agencia Europa Press.
“Los animo a trabajar incansablemente para que sea posible erradicar esa indiferencia, de tal manera que cuando un hermano o una hermana migrante llegue, encuentre en la Iglesia un lugar donde no se sienta juzgado, sino acogido; donde pueda calmar el hambre y la sed, y revivir la esperanza”, dijo el papa a los obispos reunidos por días en Darién, en uno de los centros de llegada de los migrantes que han cruzado la frontera con Colombia.
Se estima que el negocio del tráfico de migrantes mueve unos $800 millones anualmente. La ruta de Darién es la utilizada por la mayoría de migrantes para llegar a Estados Unidos.
Francisco también señaló “las crecientes devoluciones” en caliente o el estancamiento de los migrantes en países donde “no son deseados”.
Instó a responder a esta emergencia humanitaria con “fraternidad hospitalaria” ante “la indiferencia que ensangrienta” la zona.
“Esta caravana humana pasa por el Tapón del Darién –denunció el papa-, una selva que es triunfo de la naturaleza, pero que hoy se convierte en un verdadero viacrucis que no solo pone en evidencia los límites de la gobernanza migratoria en el hemisferio occidental, sino que alimenta un próspero negocio que permite acumular ganancias ilícitas del tráfico humano”.
La reunión de obispos de Colombia, Costa Rica y Panamá en se suma a otras iniciativas eclesiales en favor de los migrantes como las reuniones como el IX Encuentro de Obispos de frontera de Canadá, Estados Unidos, México, Centroamérica y el Caribe celebrado en El Salvador y el II Encuentro de Obispos de frontera Colombia – Venezuela en Cúcuta, o el Encuentro de Obispos de frontera entre Colombia y Ecuador en Pasto.