Centros toxicológicos alertan sobre el aumento del número de pacientes con complicaciones por consumo de Tusi
El Tusi o tusibi o cocaína rosada es una sustancia psicoactiva derivada de una preparación rudimentaria de componentes tales como ketamina, éxtasis y cafeína. Los narcotraficantes le añaden un colorante para hacer un polvo rosado.
Esa droga es cara. Los precios varían entre $25 y $50 por gramo. El Tusi es una droga reservada a las personas con buenos ingresos. Pero su versión mezclada con otras drogas ayuda a bajar los precios. De ese modo, se pone a disposición de un mayor número de cliente de todas las categorías sociales.
La producción de esta droga sintética se hace de manera artesanal y en el hogar. En un barrio popular de Medellín, encaramado en las montañas, y de difícil acceso, un grupo de jóvenes ha montado su laboratorio de producción de Tusi. Preparan el polvo rosado que van a vender esa misma noche.
“Ellos intuyen, tienen mucho conocimiento porque saben cómo mezclar. Dicen, tengo que mezclar esta cantidad de LSD, ketamina y unas pastillas de éxtasis que tratan y dicen que compran a Holanda, pero obviamente se la compran a un tercero, que las trae desde allá. Tienen su receta. Cada uno tiene su forma de prepararlo, venden y compran recetas también para poder empezar. No necesitas saber mucho de química ni tener como productos muy específicos para hacerlo, necesitas algo muy sencillo que es un microondas y un mortero”, explicó un fotógrafo de EFE que tuvo acceso a un rudimentario laboratorio.
Desde hace varios meses, los hospitales del país y los centros toxicológicos alertan sobre el aumento del número de pacientes con complicaciones relacionadas con el consumo de Tusi.
El aumento del número de pacientes con problemas de salud relacionados con el consumo de Tusi también es visible fuera de Medellín. Cerca de la capital, Bogotá, un centro de desintoxicación recibe cada vez más pacientes dependientes de Tusi.
Desde hace diez años, ese cóctel de sustancias está presente en todo Colombia.
Según los datos del proyecto Échele Cabeza, es consumido principalmente por personas de 18 a 34 años. La llegada del fentanilo, otra droga sintética, preocupa más porque sus efectos son 50 veces más potentes que los de la heroína y se mezcla con Tusi.
Mientras el mercado de las drogas sintéticas se extiende en Colombia, el de las drogas duras clásicas como la cocaína está en caída libre. Eso significa que ha perdido clientes que ahora prefieren probar otras drogas como Tusi o fentanilo.