Forma parte de una nueva estrategia administrativa que busca mejorar la calidad de la atención de los asegurados
Un proceso de evaluación a los funcionarios de sus 72 instalaciones a nivel nacional, además los de la Ciudad de la Salud, para determinar si están siendo productivos, inició la Caja de Seguro Social (CSS).
Esa evaluación a la gestión administrativa forma parte de las nuevas estrategias para mejorar la calidad de la atención de los pacientes asegurados, dijo César Quintero Sánchez, jefe del Departamento Nacional de Planificación de Salud de la CSS.
Explicó que si se determina que los funcionarios tienen baja productividad se reasignarán a otra instalación, a ejercer funciones dentro de la propia región.
“Hay seis procesos de atención directa: Urgencias, consulta externa, hospitalización, cirugía y rehabilitación. Eso debilita al funcionario cuando se dice que está asignado a un lugar determinado y se debe verificar si realmente está siendo productivo”, señaló.
Quintero sostuvo que la CSS debe que ser más exigentes con los gerentes, pues son los primeros que tienen que ejercer un liderazgo gerencial, atreverse y considerar que se puede lograr.
Esas evaluaciones deben realizarse cada seis meses, según Quintero, aunque reconoció que es un trabajo arduo, porque son 72 instalaciones.
En el caso de la Ciudad de la Salud reconoció que, como está iniciando operaciones, la evaluación de productividad debe ser habilitada mediante su recurso humano, equipos, insumos, modelo de gestión y atención.
“El Instituto Cardiovascular y Torácico lo está haciendo de forma excelente, y así se irán progresando poco a poco cada uno de ellos”, expresó.
Cada día, cientos de usuarios se quejan de la mala atención en las diferentes instalaciones de la CSS. Señalan que, además de las largas esperas para poder ser atendidos, cuando llegan finalmente a las citas los médicos no se encuentran en sus lugares de trabajo.
También denuncian malos tratos de funcionarios al momento de acudir a recibir atención médica, la constante reprogramación de citas sin previo aviso y la falta de empatía de los médicos con los pacientes.