Sánchez “le ha tomado el pelo” a los españoles con su amago de dimisión, estimó el líder del opositor Núñez Feijóo
Como se esperaba, Pedro Sánchez anunció este lunes que seguirá al frente del gobierno español tras amagar con una renuncia a causa de una denuncia de corrupción contra su esposa, Begoña Gómez, informó el diario Clarín.
Sánchez había anunciado el miércoles en una sorpresiva carta que cancelaba todos sus compromisos públicos hasta el lunes para revelar si dimitiría o no, a causa de los ataques de la oposición a su esposa por su presunta relación profesional con empresas que recibieron ayudas públicas.
“He decidido seguir, seguir con más fuerza si cabe”, desafió Sánchez en un mensaje desde el Palacio de la Moncloa.
Tras su carta, Sánchez frenó su aparición en encuentros políticos durante el primer fin de semana de campaña para las cruciales elecciones regionales del 12 de mayo en Cataluña, donde los socialistas buscan desalojar del poder a los independentistas. El plazo de cinco días que se había autoimpuesto para anunciar la decisión sobre su futuro terminó este lunes.
“Mostraremos al mundo -señaló- cómo se defiende a la democracia, pongamos fin a este fango de la única manera posible, mediante el rechazo colectivo sereno y democrático, más allá de las siglas y de las ideologías, que yo me comprometo a liderar con firmeza como presidente del gobierno de España”.
Sánchez “le ha tomado el pelo” a los españoles con su amago de dimisión tras cinco días de silencio, estimó este lunes el líder del opositor PP, Alberto Núñez Feijóo.
El jefe del gobierno español mencionó como claves para su decisión las manifestaciones en Madrid y otros puntos de España este fin de semana, que sin embargo no fueron masivas como esperaba. Planteó que habían “influido decisivamente” en su reflexión y criticó los “bulos deliberados” de la oposición.
Sánchez difundió el miércoles una carta contando su intención de retirarse a reflexionar cinco días sobre si merecía la pena continuar en el cargo después de que un juzgado de Madrid admitiera a trámite una denuncia presentada contra su mujer, Begoña Gómez, por presunto tráfico de influencias.
El denunciante es la agrupación de ultraderecha “Manos Limpias”, cuyo secretario general, Miguel Bernad, admitió poco después que su acción se basó en informaciones periodísticas, de cuya veracidad o no serán responsables quienes las publicaron.
La vicepresidenta primera del Gobierno y número dos del Partido Socialista (PSOE), María Jesús Montero, pidió al jefe del Ejecutivo que siga adelante, y en respuesta a la carta que envió por redes sociales le dijo que “merece la pena que ganen los buenos”.
Sánchez, de 52 años, hizo su anuncio pocas horas después de que un juez aceptara investigar a Begoña Gómez por sospechas de tráfico de influencias y corrupción, por una denuncia de una organización próxima a la extrema derecha.