Chile es el país del mundo con la mayor desigualdad de riqueza por segmentos de la población
Los distintos estudios económicos que se publican anualmente, como el Huron Global Rich List o el Global Wealth elaborado por UBS, toman el pulso al estado de los patrimonios de las personas más ricas del planeta, mostrando qué países o ciudades tienen a los vecinos más prósperos.
Sin embargo, esos estudios no muestran las diferencias que existen entre este 1% de la población que forman los ultrarricos, y el 50% de la población más pobre.
El informe World Inequality Report 2022, elaborado por la organización internacional World Inequality Database, pone el foco en cómo los distintos países del mundo gestionan la distribución de esa riqueza.
Existen diferentes formas de definir los ingresos de los individuos y, por lo tanto, múltiples formas de medir la desigualdad.
Lo mismo ocurre con la riqueza. Al realizar comparaciones internacionales de los niveles de desigualdad de ingresos o riqueza, es esencial medir los mismos conceptos en todos los países para evitar conclusiones engañosas.
Los datos del estudio revelan la enorme brecha en la distribución de la riqueza de algunos países de Centroamérica y Latinoamérica.
Destaca el caso de Chile, con una riqueza muy concentrada en el 1% de la población ultrarrica, que controla el 49,8% del total, mientras que el 50% más pobre tiene un déficit del -0,6% que denota extrema pobreza.
Si ampliamos el rango de riqueza al 10% de la población más acaudalada, la acumulación de riqueza escala hasta el 80,4% del total. Según esos datos, Chile sería el país del mundo con la mayor desigualdad de riqueza entre el segmento de población más alto y el más bajo.
Le sigue muy de cerca Brasil, con un porcentaje del 48,7% en manos del 1% de la población de ultrarricos, mientras que el 50% más pobre controla el 10% de la riqueza total. A diferencia de Chile, si se amplía el marco al 10% de la población más rica, esta controla el 59% del total, lo que indica que la mayoría de esa riqueza se concentra en la población ultrarrica, existiendo incluso una brecha entre millonarios y ultramillonarios.
México ofrece una de las tasas de desigualdad más altas del mundo, con un México 47,9% de la riqueza del país en manos del 1% de la población, mientras que el 50% más pobre registra una deuda del -0,2%.
Al igual que en el caso de Chile, si se abre el marco al 10% más rico, la acumulación de riqueza pasa al 78,7%, marcando una brecha entre la mitad más pobre y los más ricos, pero no tanto en los distintos niveles de riqueza.
Perú también destaca por la hiperdesigualdad entre los distintos segmentos poblacionales. Su población más rica acumula el 45% de la riqueza total del país. El resto de países del continente se encuentra entre el 25% y el 35% que se consideran valores promedios para el global mundial.