El expresidente acusa al presidente Joe Biden de estar “cerca de un estado vegetal”
La charla entre el magnate tecnológico Elon Musk y el expresidente estadunidense, Donald Trump, se ha saldado con un alud de dos horas de desinformación, frases incoherentes, acusaciones a Kamala Harris, alabanzas a dictadores como Vladímir Putin y errores técnicos, informó el diario catalán El Periódico.
Sin embargo, la conversación realizada a través de X, ha sido calificada por Trump como “la mejor entrevista de la historia”.
La charla inició con un gran retraso debido a fallos en la red social que Musk atribuyó a un “ataque masivo DDOS”. No obstante, empleados de la plataforma aseguraron a The Verge que había muchas probabilidades de que Musk estuviera mintiendo.
Por su parte, Trump justificó este inconveniente a que, según él, la red se vio desbordada de oyentes. El sistema debía alojar a 8 millones de usuarios simultáneamente, pero finalmente solo fueron 915,000.
En la conversación, que marca el regreso de Trump a X, tras su expulsión en 2021 por incitar al asalto al capitolio, el magnate empezó celebrando el milagro de salir ileso del atentado del pasado 13 de julio.
Dijo que “la inmigración ilegal me salvó la vida”, pues aseguró que giró su cabeza para mostrar un gráfico sobre el descenso de migrantes durante su mandato, justo antes de que la bala le alcanzará la oreja.
En la intervención, a menudo plagada de mentiras, Trump acusó al presidente Joe Biden de estar “cerca de un estado vegetal”. Además, de abrirle la frontera a los ilegales.
Asimismo, acusó a los demócratas de perpetrar un “golpe” contra Biden, y aseguró que el partido le “sacó detrás del cobertizo y básicamente le disparó”.
También arremetió contra Kamala, tachándola de “liberal radical de izquierdas”, pero dijo que es una mujer muy guapa que le recuerda a su esposa, Melania Trump.
También elogió a los lideres autócratas de Rusia, China y Corea del Norte. Dice que llevarse bien con ellos “es algo bueno” y que, con él en el poder, los Estados Unidos eran “respetados” internacionalmente.
Después de alabar a esas autocracias, cargó contra la Unión Europea, afirmando falsamente que es “imposible” vender coches estadunidenses en el viejo continente. “No son tan duros como China, pero son malos”, remarcó.
Además, sobrevaloró la ayuda económica y militar que Estados Unidos ha prestado a Ucrania en su guerra contra la invasión rusa y minusvaloró la prestada por los europeos.
A la vez, aseguró que el calentamiento global no es la mayor amenaza del planeta, pues la subida del nivel del mar permitirá tener “más propiedades frente al mar”. Dijo que la mayor amenaza es el “calentamiento nuclear”.
Los balbuceos e incongruencias de Trump han hecho que los trending topics automatizados de X hayan destacado las acusaciones sin pruebas de que el expresidente llevaría dentaduras postizas mal ajustadas.
Musk, por su lado, ha dicho que la reconstrucción de las ciudades japonesas Hiroshima y Nagasaki —arrasadas por Estados Unidos hace 79 años— demuestra que las bombas nucleares no son “tan aterradoras como la gente piensa”.
También se ofreció voluntario para unirse a una próxima administración trumpista como miembro de una posible “comisión de eficiencia gubernamental”. El expresidente acogió su propuesta con satisfacción.
“Eres el mejor recortando”, dijo entre risas de ambos. “Cuando (los trabajadores) se declaran en huelga tú les dices de acuerdo, estáis todos despedidos”, añadió.