La educación pública superior en Argentina sufrió un fuerte recorte en el presupuesto
La situación en Argentina se torna tensa, luego de que el ultraderechista Javier Milei decidió vetar una ley de financiación de la educación pública superior que recientemente había sido aprobada por el parlamento.
El conflicto se ha agudizado con profesores y estudiantes, que reclaman mayores fondos para las universidades, informó la agencia EFE.
Todo inició en los primeros meses de este año, con crecientes protestas por parte de profesores, personal no docente y estudiantes ante la decisión del Gobierno de no actualizar el presupuesto destinado a las universidades públicas, que sufrió un fuerte recorte en términos reales, debido a la elevada inflación en Argentina, que tocó un pico del 289,4 % interanual en abril pasado.
Tras una masiva movilización, el Ejecutivo otorgó fondos adicionales para garantizar el funcionamiento de las universidades, aunque los reclamos continuaron por parte de los sindicatos ante la falta de un ajuste salarial que compensara la inflación.
De acuerdo al informe, paralelamente, sectores de la oposición impulsaron en el parlamento un proyecto de ley de financiación a la educación universitaria, que finalmente fue aprobada el 13 de septiembre, pero que Milei vetó en su totalidad mediante un decreto firmado el 3 de octubre, un días después de otra multitudinaria movilización en reclamo de mayores fondos para la educación superior.
La ley de financiación universitaria establece actualizar los fondos para gastos de funcionamiento de las universidades por la variación del índice de inflación, que en agosto se ubicó en el 236,7 % interanual.
Asimismo, ordena una recomposición de los salarios universitarios, también teniendo en cuenta la inflación.
Al vetar la norma, Milei alegó que su aplicación comprometería el objetivo del equilibrio fiscal buscado por el Gobierno. El Ejecutivo pretende que la financiación de las universidades se discuta como parte del debate parlamentario del presupuesto nacional del 2025.
El informe explica que aunque la Constitución argentina habilita al presidente a vetar total o parcialmente una ley, el Parlamento puede superar ese veto, volviendo a someter a votación el proyecto y obteniendo el voto afirmativo de al menos dos tercios de ambas cámaras legislativas, en las que el oficialismo está en minoría y necesita tejer alianzas con sectores de la oposición.
Ante esa situación, sectores de la oposición han convocado a una sesión plenaria en la Cámara de Diputados para debatir sobre el veto a la ley, que tendrá lugar este miércoles ante fuertes protestas convocadas por movimientos sociales y educativos.