El ingreso de nuevos miembros al foro “tiene que ser muy bien estudiado” en un contexto mundial “polarizado y multipolar”
El asesor para asuntos internacionales del gobierno brasileño, el excanciller Celso Amorim, se declaró en contra de la entrada de Venezuela en el grupo de economías emergentes BRICS, del que forman parte Brasil, China y Rusia, entre otros, informaron medios de prensa internacional.
Yo no defiendo la entrada de Venezuela. Creo que hay que ir despacio. No sirve de nada llenar (los BRICS) de países, de lo contrario pronto se creará un nuevo G-77”, afirmó el asesor del presidente Luiz Inácio Lula da Silva en declaraciones a CNN Brasil.
Amorim, que se reunió con el mandatario brasileño, convaleciente tras sufrir un accidente doméstico, señaló que el ingreso de nuevos miembros al foro “tiene que ser muy bien estudiado” en un contexto mundial “polarizado y multipolar”.
Hay que tener una concepción estratégica de las admisiones. Recuerden que el mundo está viviendo guerras con el potencial de convertirse en guerras mundiales. Así que los criterios de admisión son más importantes que el propio país”, manifestó.
Preguntado sobre Venezuela, el ministro de Relaciones Exteriores, Mauro Vieira, quien encabeza la comitiva brasileña que participará esta semana en la cumbre de líderes de los Brics, en Kazán (Rusia), dijo a los periodistas que «todos los países candidatos tienen opciones» de formar parte del grupo.
Entre los Estados que manifestaron públicamente su interés de ingresar en el foro, formado por nueve países, figuran Cuba, Venezuela, Turquía, Azerbaiyán y Malasia, entre otros.
Brasil y Venezuela se han distanciado a partir de las elecciones celebradas en el país el 28 de julio, en las que las autoridades electorales venezolanas declararon victorioso al dictador Nicolás Maduro, resultado cuestionado por parte de la comunidad internacional.
Lula no ha reconocido ni la victoria de Maduro ni la del líder opositor Edmundo González, exiliado en España, y ha insistido desde el inicio en la publicación de las actas electorales de forma desglosada, algo que las autoridades venezolanas no han hecho.