,

Buscan acabar con la tala de "carbón de manglar"

Buscan acabar con la tala de "carbón de manglar"
Carbón de manglar en Panamá se genera con el corte de este árbol. EFE

El país tiene 170,000 hectáreas de manglares en sus dos costas, pero con un porcentaje mayor en las del Pacífico

La fabricación del “carbón de manglar” en Panamá, generado con el corte y la quema de este árbol, ha intentado en los últimos años adquirir conciencia ambiental después de que los trabajadores artesanales pusieran a funcionar programas de reforestación para recuperar las zonas taladas, informó la agencia EFE.
“Sabemos que estamos haciendo el daño. Si nada más cortamos y no sembramos después no va a ver (mangle). Eso es una barrera, porque si viene un tsunami o una ola, el manglar nos va a proteger y cuando llega acá ya está débil”, dice a EFE Marvin Rodríguez, que se dedica a la creación de ese carbón artesanal desde niño.
Desde hace años, el manglar es una especie protegida en Panamá, el país de Centroamérica con más extensión de ese árbol gracias a que tiene una variedad de doce especies diferentes en sus costas del Atlántico y el Pacífico de un total de más de 60 conocidas en el continente americano.
Carbón de manglar en Panamá se genera con el corte de este árbol. EFE
En concreto, el país tiene aproximadamente 170,000 hectáreas de manglares en sus dos costas, pero con un porcentaje mayor en las del Pacífico por las condiciones geomorfológicas y geológicas del país, han señalado especialistas en humedales costeros.
Los manglares juegan un rol fundamental en todo lo que tiene que ver con la protección de la línea costera y en controlar la contaminación. Son un ecosistema clave y hábitat para diversas especies marinas. Y, según diversos estudios, también son una barrera natural para mitigar la crisis climática.
Pero hacer carbón de mangle no es amigable con el medio ambiente, y hasta hace pocos años no estaba acompañado de programas de reforestación, además de asociarse con una alta incidencia de problemas respiratorios provocados por el humo de los hornos.
Carbón de manglar en Panamá se genera con el corte de este árbol. EFE
Tampoco es una tarea fácil: hay que salir a cortar el mangle, trasladar los tucos y finalmente meterlos dentro del horno que arderá durante cinco o seis días, hasta que la madera se vuelve carbón. También se desarrolla en un área – en teoría- protegida.
La protección del manglar es una de las intensas luchas de los ambientalistas en Panamá. Incluso actualmente se oponen a un controvertido proyecto portuario con inversión extranjera que se levantará en el Pacífico de Panamá, cerca de la frontera con Costa Rica, porque, alegan, es una zona protegida de ese árbol.
Pero también es una lucha del Gobierno. Justamente, el pasado viernes el Ministerio de Ambiente de Panamá y la ONG Worldview International Foundation (WIF) firmaron un acuerdo para restaurar los manglares “degradados” a través actividades de reforestación, monitoreo científico y la participación de las comunidades locales “con miras a generar beneficios ambientales y económicos para las zonas costeras”.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *