El dueño de X se reunió en secreto en Nueva York con el embajador iraní ante la ONU para reducir la tensión bilateral
Recientemente el presidente electo Donald Trump dijo que podría necesitar construirle una suite a Elon Musk en Mar-a-Lago, su club residencial en Florida porque dice que el empresario multimillonario no se cansa de estar allí: Y puede que nunca quiera irse, bromeó el republicano. Y es que durante la última semana, el dueño de SpaceX ha pasado mucho tiempo con Trump en su propiedad y también viajó a Washington con él, informó el diario español La Razón.
Las declaraciones del mandatario electo se dieron durante la gala del America First Policy Institute en Florida, donde destacó a su nuevo copresidente del Departamento de Eficiencia Gubernamental, calificándolo como una persona de alto coeficiente intelectual que dejó de lado sus propios intereses por el bien de la nación.
Esas palabras muestran el nivel de poder que Trump está dispuesto a darle a Musk, al parecer incluso en lo que tiene que ver con la política exterior de Washington. De hecho, ha sido reportado que el dueño de la red social X está tratando de negociar algún tipo de acuerdo entre Estados Unidos e Irán.
Según ha informado The New York Times, citando a dos funcionarios iraníes anónimos, el magnate tecnológico y el hombre más rico del mundo se reunió el lunes en Nueva York con el embajador de Irán ante Naciones Unidas.
La reunión, que tuvo lugar en un lugar secreto, se habría centrado en cómo reducir las tensiones entre los dos países y habría durado más de una hora.
De acuerdo con estas fuentes, el encuentro fue “positivo” y “una buena noticia”, aunque de manera oficial ni la campaña de Trump ni Musk comentaron sobre el hecho. No está claro si la reunión se produjo bajo sus órdenes o no. Lo que sí está confirmado es que Musk solicitó la reunión y el embajador eligió el lugar.
Previo a este encuentro, el presidente electo había incluido a Musk en una llamada telefónica la semana pasada con el presidente ucraniano Volodimir Zelenski, solo unas horas después de que Trump ganara las elecciones.
Como parte de esa influencia, también hace algunas semanas The Wall Street Journal había reportado que el multimillonario sostuvo conversaciones secretas con el presidente ruso Vladimir Putin. Esto es relevante porque y Rusia es aliada de Irán.
La reunión entre Musk y el embajador iraní podría indicar un cambio de tono entre Irán y Estados Unidos.
Las relaciones entre ambos países no han sido positivas desde el primer mandato de Trump, cuando disolvió el acuerdo nuclear con Irán negociado por la administración de Obama y aprobó el asesinato del general iraní Qassem Soleimani en el 2020.
El apoyo de Estados Unidos a la brutal agresión de Israel contra Gaza y Líbano bajo la administración de Biden tampoco ha ayudado, especialmente porque Irán respalda al grupo militante libanés Hezbolá, el objetivo declarado de los bombardeos israelíes.
Trump ha sido un firme defensor de la guerra de Israel y ha atacado al presidente Biden por lo que considera un apoyo insuficiente al país, que ve a Irán como su principal enemigo.
De manera oficial la tarea de Musk es liderar un nuevo departamento de eficiencia gubernamental en su próxima administración. Y hasta ahora, el conflicto más diciente es esa participación del multimillonario en la reunión con Zelenski, porque Ucrania es un país que ha dependido del servicio de internet satelital Starlink del empresario en medio de su guerra con Rusia.
Mientras tanto, en Oriente Medio esta información es recibida dentro de un clima de creciente tensión. El portal Axios reportó hoy que los ataques israelíes contra instalaciones militares iraníes el mes pasado destruyeron una instalación activa de investigación de armas nucleares en el complejo militar de Parchin, cerca de Teherán.
De acuerdo con el informe, el ataque dañó significativamente los esfuerzos de Irán por reanudar la investigación de armas nucleares. Al menos un funcionario estadunidense afirmó que el régimen iraní estaba utilizando la instalación para “actividad científica que podría sentar las bases para la producción de un arma nuclear”, cuenta Axios.