En la trama de corrupción están involucrado dos altos cargos del gobierno y dos intermediarios, cuyos nombres no han sido revelados
Un alto cargo del régimen de Nicolás Maduro y un intermediario se gastaron junto con sus familias más de $1.1 millones en unas vacaciones en la paradisíaca isla de San Bartolomé gracias a los $28 millones en sobornos por cuenta de Telefónica Venezuela, informó el diario El Nacional, basado en una investigación del medio español El País.
Las vacaciones en sí costaron más de $500,000, y el intermediario se gastó allí cerca $605,000 en relojes de lujo y joyas, para disfrute del alto cargo y su esposa, reseña el medio español.
Por esta trama, Telefónica Venezuela, subsidiaria de la española Telefónica, pagará una multa de más de $85.2 millones en Estados Unidos, donde la justicia investiga el caso de sobornos a dos funcionarios del régimen de Maduro y en la que también están involucrados dos intermediarios.
Fuentes judiciales indicaron que, gracias a todos ellos, la compañía venezolana pudo tener acceso preferente a dólares en una subasta de divisas.
Telefónica Venezuela llegó a un acuerdo de enjuiciamiento diferido con la justicia estadunidense a cambio del pago de una multa de $85.2 millones.
Según documentos judiciales, Telefónica Venezolana participó en el 2014 en una subasta de divisas patrocinada por Maduro que le permitió canjear bolívares por más de $110 millones, 65% de los fondos que la dictadura venezolana adjudicó en esa subasta.
Para garantizarse el cambio, Telefónica Venezuela reclutó a dos proveedores que pagaron aproximadamente $28.9 millones a un intermediario, a sabiendas de que parte de esos fondos se pagarían como “comisión” a funcionarios del gobierno venezolano a través de cuentas bancarias en Estados Unidos.
Para ocultar esos pagos, Telefónica Venezolana cubrió el costo de los sobornos comprando equipos a los dos proveedores a precios inflados, según la acusación.
“Telefónica Venezolana acordó llenar los bolsillos de funcionarios venezolanos corruptos para obtener acceso a divisas estadunidenses y mantener su posición en el mercado de telecomunicaciones venezolano”, asegura el fiscal federal Damian Williams del distrito sur de Nueva York en un comunicado.
Como parte del acuerdo, Telefónica Venezolana y la matriz española se comprometieron a seguir cooperando con el tribunal neoyorquino en cualquier investigación penal en curso o futura que surja durante la vigencia del DPA.
La compañía estará sometida a vigilancia o supervisión especial durante un período de tres años, la vigencia del acuerdo al que ha llegado con el Departamento de Justicia, en que se halla en una situación de “liberación condicional de responsabilidad”.
Si al cabo de esos tres años ha cumplido sus compromisos, el Departamento de Justicia no presentará cargos. Hasta el momento, se desconoce la identidad de los involucrados en la trama de corrupción.