Indica que hoy día, el último avión que busca aterrizar en Tocumen debe formar una fila
De acuerdo al informe, el director general de la Autoridad de Aeronáutica Civil (AAC), Rafael Bárcenas, explicó que el espacio aéreo de Panamá registra un incremento dramático debido a las operaciones de Copa Airlines; sin embargo, esa expansión no ha ido a igual velocidad por parte del Aeropuerto Internacional de Tocumen (AITSA), que ha quedado rezagado, situación que calificó como “un espacio aéreo ineficiente, pero manejable todavía”.
A Bárcenas le preocupan los tiempos, ya que deben comprar un ‘software’ valorado en unos $500.000 o $600.000, para crear una serie de procedimientos, que actualmente se hacen de manera manual y que deben ser certificados.
El funcionario insistió, según el informe, en que si nos quedamos tranquilos en 18 meses, lo podrían llamar para decirle que un avión no puede venir hoy a Tocumen, porque otro en tierra está frente a otro, ya que no hay una guía para dónde girar.
Los 18 meses es el tiempo en el que Boing debe entregarle a Copa Airlines nuevos aviones que han contratado. Es el tiempo que estima Bárcenas, se tiene para resolver el problema, ya que al cabo de esos meses Tocumen no tendrá dónde estacionar.
Según Bárcenas, hoy día, el último avión que busca aterrizar en Tocumen debe formar una fila. “El último de la fila estaría llegando a la isla de Coiba y no a Chitré. Ahora mismo, si llegaran 30 aviones, el último tiene que pasar por Taboga y después venir desde El Salado para aterrizar”.
José Ruiz Blanco, gerente general del AITSA, coincidió en la necesidad de expandir la terminal aérea. Indicó que se encuentran trabajando de la mano con Copa Airlines y AAC para ver cuáles son los pasos a seguir en los temas de expansión y cuál es la mejor opción.