El Departamento de Seguridad Nacional revocó una directriz de Biden que instruía a las autoridades migratorias a evitar redadas en esos lugares o cerca a ellos
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, rechazó este miércoles la medida del presidente estadounidense, Donald Trump, quien el martes dio vía libre a redadas de migración en escuelas, colegios e iglesias de aquel país, previamente considerados lugares “protegidos”, informó la agencia EFE.
“Por supuesto que no estamos de acuerdo con dicha medida”, señaló la mandataria durante su conferencia de prensa matutina.
La reacción de la gobernante mexicana ocurre luego de que el martes, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) revocara una directriz de la administración del expresidente Joe Biden, que instruía a las autoridades migratorias a evitar redadas en esos lugares o cerca a ellos.
El Gobierno estadounidense alega que la decisión “empodera” a los agentes de migración a “seguir las leyes” y capturar a los que llaman “criminales extranjeros”, según indicó un portavoz del DHS en un comunicado.
Además, el texto asegura, sin citar pruebas o ejemplos, que hay “criminales” que se “esconden en las escuelas y las iglesias” de Estados Unidos para evadir los arrestos.
La decisión llegó un día después de que Trump asumiera el poder y enfatizara que cumplirá con su promesa de campaña de llevar a cabo la mayor campaña de deportaciones de migrantes en la historia de Estados Unidos.
Al respecto, Sheinbaum aseguró que México busca proteger a sus connacionales en Estados Unidos, por lo que se ha instruido al canciller mexicano una coordinación con los cónsules para dar apoyo legal y, en caso de que sean deportados o quieran regresar de manera voluntaria al país, se les dará apoyo a través del programa ‘México te abraza’.
“¿Qué hacemos nosotros? Apoyarlos legalmente y recibirlos en México con el programa ‘México te abraza’ y poderlos orientar a distintos lugares y, en caso de que haya una persona que no es mexicana en la frontera, pues también le damos apoyo humanitario”, acotó.
En el país preocupan las deportaciones masivas prometidas por Trump porque los mexicanos son cerca de la mitad de los 11 millones de indocumentados en Estados Unidos y sus remesas representan casi el 4% del producto interior bruto (PIB) de México, que en el 2024 habría recibido un récord estimado de $65,000 millones.