El juicio, que se desarrollará entre el 19 de mayo y el 2 de junio, contará con la declaración de 82 testigos presentados tanto por la Fiscalía como por la defensa de los acusados.
El Supremo Tribunal Federal de Brasil ha iniciado este lunes las audiencias del proceso judicial contra ocho acusados de intentar anular los resultados de las elecciones presidenciales de 2022 y dar un golpe de Estado en el país.
El juicio, que se desarrollará entre el 19 de mayo y el 2 de junio, contará con la declaración de 82 testigos presentados tanto por la Fiscalía como por la defensa de los acusados.
Las primeras audiencias fueron realizadas por videoconferencia y contaron con la declaración de seis testigos de la Fiscalía. Entre ellos se encuentran dos excomandantes de alto rango del Ejército y la Fuerza Aérea de Brasil: el general Marco Antonio Freire Gomes y el brigadier general Carlos de Almeida Baptista Júnior.
Ambos, actualmente en la reserva, admitieron haberse reunido en varias ocasiones con el expresidente Jair Bolsonaro y sus asesores cercanos, en las cuales discutieron un presunto plan para dar un golpe de Estado tras las elecciones presidenciales de 2022, en las que Luiz Inácio Lula da Silva derrotó a Bolsonaro.
Los acusados en este caso, incluidos exministros de Bolsonaro y altos mandos militares, son señalados por liderar una conspiración golpista destinada a anular los resultados de las elecciones de 2022 y mantener a Bolsonaro en el poder.
Según la acusación, los conspiradores no solo planearon un golpe de Estado, sino que también consideraron asesinar a Lula y a otras altas autoridades, además de fomentar los actos golpistas del 8 de enero de 2023.
La Corte Suprema de Brasil, por unanimidad, decidió en marzo pasado que había suficientes pruebas para juzgar a los ocho acusados por cinco delitos graves, los cuales incluyen abolición violenta del Estado democrático de derecho, intento de golpe de Estado, implicación en organización criminal armada, daño calificado y deterioro de patrimonio.
Entre los acusados se encuentran figuras clave del gobierno de Bolsonaro, como el exministro de Justicia Anderson Torres, el exministro de Defensa Paulo Sergio Nogueira, el exministro de Seguridad Institucional Augusto Heleno Ribeiro, y el exdirector de la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN), Alexandre Ramagem, además del excomandante de la Marina, Almir Gabriel.
También figura el teniente-coronel Mauro Cid, quien fue edecán de Bolsonaro y es considerado una pieza clave en las investigaciones. Cid, aunque está enjuiciado, podría recibir beneficios por su colaboración con la Justicia.
A partir del 22 de mayo, comenzarán las audiencias para escuchar a los testigos convocados por la defensa de Mauro Cid, mientras que los testigos de los otros seis acusados serán escuchados entre el 23 y el 29 de mayo.
El 30 de mayo comenzarán a declarar los testigos presentados por Bolsonaro, entre ellos el gobernador de São Paulo, Tarcísio de Freitas, y el exvicepresidente y actual senador Hamilton Mourão, junto con otros altos funcionarios y militares de su gobierno (2019-2022).