El panorama para el comercio se ha tornado cada vez más complicado por casi dos meses de paralización
Los cierres de calles y las huelgas que se han registrado en distintas regiones del país están afectando la cadena de suministro de alimentos, lo que ha comenzado a incidir en el alza de precios y podría provocar escasez de productos perecederos, alertaron representantes del sector comercial, informó el diario Metro Libre.
Roberto Pretelt, presidente de la Asociación de Comerciantes y Distribuidores de Víveres y Similares de Panamá (ACOVIPA), señaló que el panorama para el comercio se ha tornado cada vez más complicado.
“Todo este año han ido aumentando los impuestos y fletes, lo que afecta al sector. Por ello, el empresario ha tenido que tomar dos opciones: despidos masivos o aumento de precios, aunque eso implique una caída en las ventas”, expresó Pretelt.

Actualmente, las ventas en supermercados, cadenas de restaurantes y comercios a nivel nacional se sitúan en un 25% por debajo de los niveles normales, según el representante gremial.
La situación se agrava en zonas que enfrentan bloqueos prolongados, donde la distribución se ve interrumpida y los productos no logran llegar a tiempo a los puntos de venta.
Desde el punto de vista regulador, Ramón Abadi, administrador de la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (ACODECO), confirmó que, si bien hasta ahora los aumentos no se han percibido con fuerza en el consumidor final, esto se debe a que los distribuidores aún cuentan con ciertas reservas almacenadas.
“En provincias como Bocas del Toro y Darién, donde persisten los cierres de calles, los productos no pueden llegar, lo que provoca daños en los alimentos y pérdidas económicas considerables”, advirtió Abadi.
Los expertos coinciden en que la situación podría deteriorarse si persisten las interrupciones en la logística nacional, generando una presión inflacionaria en productos básicos y un impacto directo en la economía de las familias panameñas.
