Un paso importante que contribuirá a la atracción de inversiones y a generar más confianza en el desempeño fiscal del país, dice el economista Rolando Gordón
El país amaneció con una buena noticia. El Parlamento Europeo votó a favor de que Panamá sea excluida la lista de países con regímenes de blanqueo de capitales y de financiación del terrorismo.
Hoy, la Unión Europea ha votado a favor de sacar a Panamá de su lista de países de algo riesgo. Es un reconocimiento al trabajo serio que estamos haciendo como país. Gracias a todo el equipo de gobierno que trabajó para recuperar la confianza internacional”, dijo el presidente José Raúl Mulino a través de sus redes sociales.
La votación del Parlamento Europeo, se basó en una recomendación de la Comisión Europea que había señalado que Panamá cumplió con todos los requisitos para ser excluido de la lista de países con problemas de blanqueo de capitales y de financiación del terrorismo.
“Luego de una votación en el Parlamento Europeo, Panamá logró salir de la lista de jurisdicciones de alto riesgo que presentan deficiencias estratégicas en sus regímenes nacionales de lucha contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo”, dijo un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Señaló que al haber demostrado avances técnicos significativos y sostenibilidad, así como el resultado de una ofensiva diplomática directamente ante la Unión Europea, finalmente el país ha sido reconocido en sus esfuerzos y ha logrado ser excluido de la lista.
“Ese logro del gobierno del presidente José Raúl Mulino hace justicia con la reputación del país y abre puertas a la inversión extranjera directa proveniente de Europa”, resaltó el comunicado oficial.
Por su parte, Rolando Gordón, decano de la Facultad de Economía de la Universidad de Panamá, dijo que se trata de un paso importante que contribuirá a la atracción de inversiones y a generar más confianza en el desempeño fiscal del país.
“El gobierno ha cumplido con los requisitos técnicos y con la adaptación de las leyes frente a las exigencias de la Unión Europea”, añadió Gordón.
Reconoció que “esto, sin duda, ayudará a la atracción de inversión extranjera directa y contribuirá a elevar los niveles de confianza en el comportamiento de la economía, sobretodo en el aspecto fiscal”.
