Un 44% lo destina a pagar obligaciones financieras, y más del 70% afirma que este ingreso adicional mejora su productividad y motivación laboral
El décimo tercer mes, correspondiente al pago de agosto, sigue siendo un respiro financiero clave para los trabajadores panameños, así lo revela el estudio “XIII Mes” del portal de empleo Konzerta, el cual indica que el 44% de los trabajadores utiliza este dinero para pagar deudas, mientras que el 77% reconoce que este ingreso adicional ayuda a aliviar la presión financiera, informó Jeff Morales, gerente de Marketing de Konzerta.
En el estudio participaron cerca de 500 trabajadores panameños, permitiendo conocer no solo el uso del décimo, sino también su impacto en el desempeño laboral y el bienestar de quienes lo reciben.
Sobre el uso del décimo de agosto el 44% de los trabajadores indicó que lo usa para pagar deudas, el 20% lo destina a otros gastos, el 19% logra ahorrarlo y el 17% lo invierte.

Además de su uso financiero, el estudio también evidenció un impacto positivo en la productividad y motivación laboral. Un 72% de los encuestados asegura que el décimo incrementa su productividad, aunque este porcentaje representa una caída de siete puntos respecto al 2024.
Por otro lado, el 78% señaló sentirse más motivado para cumplir sus tareas, un punto porcentual por encima del año anterior.
El 58% de los trabajadores considera que este pago forma parte de su equilibrio financiero, siendo una herramienta clave para enfrentar compromisos económicos, de ellos, el 25% afirma que mejora su salud financiera “muchísimo”, el 33% dice que la mejora “mucho” y el 28% que la mejora “regularmente”.
Para Morales, este ingreso adicional no solo permite pagar deudas, sino que también impacta en el bienestar físico y mental de los trabajadores. “Este año, el 61% de los encuestados considera que el décimo impacta positivamente en su bienestar integral, un aumento de siete puntos porcentuales respecto al 54% del año pasado”, destacó.
El estudio confirma que, más allá de ser un derecho laboral, el décimo tercer mes cumple un papel esencial en la economía personal y emocional de los panameños, actuando como un soporte para enfrentar obligaciones y fortalecer su estabilidad general.
