Atribuye a “políticos fracasados”, la versión de que Estados Unidos intenta instalar bases militares en el país
El embajador de Estados Unidos en Panamá, Kevin Cabrera, afirmó que su país no tiene nada contra las personas chinas radicadas en Panamá, sino contra la influencia “maligna” del Partido Comunista Chino.
“Sabemos que aquí hay una descendencia de muchas décadas de personas chinas, que están integrados en la sociedad de Panamá. No tenemos nada contra esas personas. Lo que tenemos es en contra de la influencia maligna del partido comunista chino y todos los días estamos trabajando para eliminarla”, añadió Cabrera en el programa “En directo con Nelson Rubio” de América Radio Miami.
Aseguró, sin presentar pruebas, que China hace ataques cibernéticos contra otros países, mientras que “Estados Unidos no hace eso, ayuda a sus aliados, a sus socios y vecinos”.
Destacó que sus prioridades como embajador en el país, son las del presidente Donald Trump, además de eliminar la influencia china, ayudar en temas de seguridad, narcotráfico, inmigración ilegal y gestionar oportunidades para empresas de Estados Unidos.
“Trabajo para que Panamá y Estados Unidos sigan siendo aliados en temas económicos, políticos y de seguridad”, señaló Cabrera.
Reiteró que Estados Unidos no pretende instalar bases militares en Panamá, versión difundida, según dijo, “por políticos fracasados”. “Todos han perdido, no les ha ido muy bien”, añadió.
Sin señalarlo por nombre, se refería al expresidente Martín Torrijos. Se trata de políticos “que decidieron ser intelectualmente deshonestos. Muchos de ellos también firmaron sus propios acuerdos cuando estuvieron en el poder”.
Sostuvo que la relación entre Panamá y Estados Unidos es armónica y advirtió que solo dos países, “solos dos”, tienen la responsabilidad de cuidar el Canal: Estados Unidos y Panamá.