Advierte que la deriva autoritaria de Trump demuestra comportamientos antidemocráticos en la región y debilita la defensa de los derechos humanos
La directora regional del Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral (IDEA Internacional), Marcela Ríos, advirtió que el deterioro democrático en Estados Unidos bajo la administración de Donald Trump está ocurriendo a una velocidad alarmante, con consecuencias directas para América Latina, informó la agencia EFE.
Ríos alertó que el viraje autoritario del gobierno estadunidense legitima comportamientos iliberales y transforma las narrativas sobre la democracia en la región, debilitando a su vez el rol tradicional de Estados Unidos como promotor de derechos humanos y democracia.
“Cuando hay mucha concentración de poder, el deterioro democrático puede ocurrir extremadamente rápido. Es algo que nos preocupa sobremanera”, afirmó la politóloga chilena.
Ríos recordó que cuando IDEA fue fundado en 1995, en plena ola de expansión democrática, solo Cuba era considerado un régimen autoritario en la región.
Hoy, ese número ha aumentado a cinco: Cuba, Nicaragua, Venezuela, Haití y El Salvador.
En el caso salvadoreño, la experta expresó su inquietud por el rumbo que ha tomado el gobierno de Nayib Bukele, particularmente por el régimen de excepción, la reelección indefinida y las detenciones masivas, que superan las 87,000 personas.
“No podemos intercambiar seguridad por democracia”, advirtió Ríos. “A América Latina le ha costado mucho construir instituciones de justicia que funcionen”.
Según Ríos, el descontento ciudadano con la democracia tiene raíces en la corrupción, la lentitud institucional y la falta de soluciones concretas a problemas como la inseguridad o la desigualdad.
La experta sostuvo que, en un mundo hiperconectado, donde se espera inmediatez, la democracia es percibida como demasiado lenta.
También apuntó que los movimientos extremistas aprovechan ese vacío para ofrecer respuestas simples y polarizantes a desafíos complejos.
Pese al panorama sombrío, la directora regional de IDEA Internacional aseguró que aún hay razones para el optimismo, especialmente en América Latina.
“La democracia sigue estando en manos de las personas. Las y los latinoamericanos todavía tienen un apego muy fuerte a la democracia porque han luchado por ella en momentos difíciles”, concluyó Ríos.