Un grupo de hackers denominado INCRansom se adjudicó el ataque, solicitando $7 millones por el rescate de la información
Chapman señaló que se interpuso la denuncia para deslindar responsabilidad y dar con los responsables.
Un grupo de hackers llamado INCRansom se adjudicó el ataque y solicitó $7.5 millones para no divulgar el material extraído.
Chapman admitió que se extrajo documentación, pero sin relevancia ni consecuencias.
“Se extrajeron algunos documentos del Departamento de Asesoría Legal, que en efecto son públicos, y no tienen relevancia. El crimen es haber penetrado el sistema”, dijo el ministro.
Afirmó que de inmediato se activaron los protocolos de seguridad, luego de detectar el “ransomware”, un tipo de malware o programa dañino, que restringe el acceso a los archivos o datos de un sistema infectado y exige un rescate a cambio de restaurar el acceso.
El ministro reiteró que la documentación sustraída era de conocimiento público y no sensitiva, por lo que no ha tenido consecuencias, mientras las autoridades avanzan con las investigaciones.
