La región crecerá a un ritmo anual de 7,9%, impulsada por la digitalización y la innovación fintech, en un contexto de reconfiguración global del sector
La industria global de pagos se encuentra en un punto de inflexión, y América Latina será su principal motor de crecimiento en los próximos años, así lo revela el informe anual Global Payments Report de Boston Consulting Group (BCG).
Según el estudio, los ingresos por pagos a nivel mundial alcanzarán los $2,400 millones para el 2029, pese a que el crecimiento global se moderará a un promedio de 4% anual en ese periodo.
En contraste, América Latina proyecta un crecimiento anual de 7,9% entre el 2024 y el 2029, casi el doble del promedio mundial, posicionándose como la región de más rápido avance en el sector.
“La digitalización acelerada y el entorno económico particular de la región están configurando una dinámica única en América Latina”, señaló Gonzalo Troncoso, Director General y Socio de BCG. “Los actores que se alineen con estos cambios ahora liderarán la próxima década”.
Entre los factores que están transformando el ecosistema de pagos en la región destacan: La persistente inflación, que mantiene altos los ingresos no transaccionales derivados de intereses.
El crecimiento de los pagos digitales, con especial énfasis en sistemas de cuenta a cuenta (A2A) como Pix en Brasil, que ofrecen alternativas al efectivo y las tarjetas.
El rol predominante de las tarjetas de crédito, que representan aproximadamente la mitad de los ingresos por transacción en la región en el 2024, siendo clave en países como Chile y Colombia.
A nivel global, el informe identifica cinco fuerzas estructurales que están redefiniendo el panorama de los pagos: 1- La inteligencia artificial agéntica (agentic AI). 2- El auge de las monedas digitales, incluidas las stablecoins. 3- La disrupción fintech. 4- El crecimiento de los sistemas A2A en tiempo real. 5- Una profunda transformación en los costos operativos.
Troncoso advierte que “estamos entrando en una era donde el crecimiento y la complejidad van de la mano. Las empresas que integren profundamente estas nuevas capacidades en sus modelos operativos y de negocio serán las ganadoras”.