La iniciativa busca reducir la contaminación marina y promover la economía circular mediante el aprovechamiento de residuos plásticos
La Autoridad de los Recursos Acuáticos de Panamá (ARAP) y la Autoridad Marítima de Panamá (AMP) han puesto en marcha un proyecto piloto en el puerto de La Boca, en el corregimiento de Ancón, que facilitará a los pescadores artesanales el descarte seguro de redes de pesca abandonadas, conocidas como redes fantasmas, informó a través de un comunicado oficial la AMP.
Estas redes constituyen una de las formas más letales de basura plástica para la vida marina y representan cerca del 10% de los residuos que contaminan los océanos, según la FAO y el PNUMA.
En 2024, solo en la Bahía de Panamá se retiraron 1,300 kilogramos de redes, y se reportaron tres casos de ballenas enredadas en el Golfo de Panamá, evidenciando el impacto de este problema ambiental.
“Este es un proyecto que queremos llevar a todos los puertos estatales administrados por la AMP”, indicó Yader Sánchez, oficial de Prevención y Control de la Contaminación de la AMP.
Por su parte, Gerardo Irimia Arosemena, administrador encargado de la ARAP, destacó la importancia de rescatar, cortar y retirar estas redes del mar para evitar mayores daños ecológicos.
Además del descarte adecuado, la estrategia contempla la transformación de estos residuos plásticos en combustibles alternativos para la industria del cemento, mediante procesos de incineración controlada, fomentando así la economía circular.
En tanto, la bióloga Inés Sánchez, de la Dirección de Ordenación de la ARAP, señaló que la medida se acompaña de campañas de educación ambiental dirigidas especialmente a los pescadores, quienes juegan un rol clave en la protección marina.
Panamá ratificó su compromiso internacional para la eliminación de redes fantasmas en el 2017, convirtiéndose en el primer país latinoamericano en unirse a la Iniciativa Global contra las Redes de Pesca Fantasmas.