La directora mexicana presentó su filme autobiográfico en el Festival Internacional de Cine de Morelia, donde destaca un equipo casi íntegramente femenino
En una industria cinematográfica mexicana aún dominada por hombres, Mayra Hermosillo ha logrado abrirse paso con una voz propia y poderosa, su ópera prima, “Vainilla”, fue presentada en la selección oficial del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), con un relato profundamente íntimo sobre la infancia en un matriarcado y la ausencia paterna, inspirada en su propia historia familiar, informó la agencia EFE.
“Tuve la suerte de crecer en este matriarcado, pero por muchos años pensé que había algo mal en nosotras por no tener un hombre en casa”, confesó Hermosillo durante la presentación del largometraje.
Con una narrativa contada a través de los ojos de la pequeña Roberta (Aurora Dávila), el filme retrata la vida de una “niña rara” en el México de finales de los años 80, criado por mujeres fuertes que, en palabras de la directora, escapaban de la violencia física y emocional ejercida por figuras masculinas.
Hermosillo, también actriz en series como Gringo Hunters, ha armado un equipo técnico y artístico conformado casi exclusivamente por mujeres.

María Castellá, Natalia Plascencia, Rosy Rojas y la debutante Aurora Dávila integran el núcleo del reparto, al que la directora llama con afecto: “hermanas, familia, mejores amigas”.
“Después de esta película, ninguna de nosotras es la misma”, declaró Plascencia durante el encuentro con la prensa, mientras que la joven Dávila confesó entre lágrimas no querer volver a casa tras haber sido abrazada por sus compañeras.
“Vainilla” también se exhibió en la sección paralela Jornadas de los Autores del Festival de Venecia, consolidando el impacto de esta obra que Hermosillo ha compartido con figuras cercanas, como el director Guillermo del Toro, uno de sus referentes.
Aunque el feminismo no fue una consigna explícita en su niñez, Hermosillo afirma que ha ido cultivando una conciencia feminista a través del ejemplo, y “Vainilla” es prueba de ello: un proyecto que no sólo visibiliza otras formas de familia, sino que reivindica el papel de la mujer como creadora, protectora y protagonista.

“Nunca se habló mal de los hombres en mi casa, pero cada una de esas mujeres tuvo que tomar decisiones valientes. Ahora entiendo que esa fue su forma de resistencia”, reflexionó la cineasta de 38 años.
Para María Castellá, interpretar a Alicia -inspirada en la madre de Hermosillo- fue una oportunidad para redescubrirse. “Llegué con muchas inseguridades.
Esta película me dio tierra, me dio fuerza, y me abrió puertas que llevaba años intentando tocar”, dijo.
“Vainilla” compite en la categoría de largometraje de ficción del FICM, donde, de las 11 películas seleccionadas, solo cuatro son dirigidas por mujeres, en ese contexto, el trabajo de Hermosillo resalta no solo por su sensibilidad narrativa, sino por su construcción colectiva desde lo femenino, desde la memoria y desde la ternura.
