Expertos advierten sobre el uso responsable de este instrumento financiero y la importancia de evitar el sobreendeudamiento
Los panameños mantienen una deuda de $2,852,916,756 derivada del uso de 848,163 tarjetas de crédito en circulación, de acuerdo con datos recientes de la APC Experian, donde el informe revela que el saldo promedio por tarjeta asciende a $3,364, reflejando la alta dependencia del crédito en el consumo nacional, informó el diario Metro Libre.
Las tarjetas de crédito continúan siendo el producto con mayor morosidad dentro del sistema financiero, registrando un 8,8% sobre saldo, aunque esta cifra representa una mejoría respecto al año pasado, cuando se situaba en 9,8%.
Un informe de la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (ACODECO) detalla que entre las modalidades disponibles se incluyen las Visa o MasterCard Cash Back Clásica o Tradicional, Clásica o Estándar, Empresarial o Corporativa, Dorada o Gold, y Platino o Platinum.

Asimismo, el documento advierte que las tasas de interés aplicadas varían significativamente, oscilando entre 13,50% y 28%, dependiendo del tipo de tarjeta y la entidad emisora.
Economistas y analistas coinciden en que las tarjetas de crédito deben ser utilizadas con responsabilidad, ya que, bien administradas, pueden servir como instrumentos de financiamiento de corto plazo, ayudar a construir historial crediticio y facilitar la adquisición de bienes y servicios, siempre que se evite el sobreendeudamiento.
“Las tarjetas de crédito amplían la inclusión financiera y facilitan la vida cotidiana. Pero su uso requiere disciplina, no son una extensión del ingreso, sino una herramienta que debe usarse con criterio”, advirtió el economista Patricio Mosquera, quien también recordó que usarlas bien implica pagar a tiempo y evitar excesos.

Por su parte, el economista Patricio Bosquez destacó que en la actualidad muchos panameños utilizan las tarjetas como vía para reactivar su historial crediticio, lo cual “facilita la posibilidad de acceder posteriormente a préstamos personales o hipotecarios”.
Desde la Unión Nacional de Consumidores de la República de Panamá (UNCUREPA), su representante Pedro Acosta recordó que con una tarjeta de crédito estás comprando dinero con interés para luego pagarlo a futuro, e hizo un llamado a la responsabilidad. “Las tarjetas facilitan el pago y la compra, pero hay que recordar que todo tiene un costo financiero que debe asumirse con responsabilidad”, dijo.
Los especialistas coinciden en que, aunque las tarjetas de crédito son una herramienta útil para la planificación financiera personal, su manejo inadecuado puede convertirse en una fuente de endeudamiento crónico, por lo que recomiendan educación financiera y prudencia en su uso.
