El presidente destacó además, la urgencia de reforzar la seguridad nacional ante el crecimiento del narcotráfico
La situación financiera que enfrenta la Caja de Seguro Social (CSS) se acrecienta debido a deudas acumuladas por diversas entidades estatales, incluyendo un ministerio que adeuda $17 millones desde hace 12 años y que de acuerdo al presidente José Raúl Mulino., deberán comenzar a pagar a partir del presupuesto del 2026, informó el diario La Estrella.
De acuerdo al informe, Mulino insistió en que los recursos asignados para cubrir estas obligaciones están incluidos en el presupuesto del 2026 y deberán utilizarse exclusivamente para ese fin. “El pago del Seguro Social tiene que salir. Es una irresponsabilidad completa que nadie haya exigido nada en 12 años”, señaló, destacando que el país debe adaptarse a una nueva forma de administración pública.
El presidente también recordó que en febrero fue necesario realizar un traslado de $97 millones para evitar incumplimientos, lo que lo convenció de la urgencia de las reformas aprobadas a la CSS. “Le dieron un respiro al sistema financiero”, afirmó.

Mulino, además, respaldó el trabajo de la Contraloría General de la República (CGR) al refrendar proyectos ministeriales, aunque reconoció que se encontraron “gavetas llenas de contratos y adendas para coimear”, señala el informe.
Sobre seguridad, el mandatario admitió estar muy preocupado. “Lo que estamos viviendo no es relajo, es grave, muy grave”. Señaló que las recientes incautaciones y casos en el Aeropuerto de Tocumen demuestran que el crimen organizado “va por delante innovando”, y alertó que los enfrentamientos entre grupos criminales responden al incremento del flujo de droga en la región.
En defensa de la compra de tres aviones Tucano por $76 millones, operación cuestionada por su costo, Mulino argumentó que la vigilancia aérea resulta más eficiente que depender únicamente de operaciones marítimas.

Sobre energía, Mulino reiteró su visión de que Panamá pronto tendrá un superávit eléctrico, impulsado por energías solar y eólica, así como por la eventual interconexión con Colombia. No obstante, reconoció que el proyecto sigue pendiente de acuerdos con pueblos originarios que mantienen objeciones sobre el uso de sus tierras.
Anticipó que el 2026 será un año “complicado”, pero se mostró optimista y comprometido con la rendición de cuentas, por lo que seguirá ofreciendo sus habituales conferencias de prensa de los jueves, con el interés de informar.
