La batalla campal en Sinaloa, se produjo entre hombres fuertemente armados y las fuerzas de seguridad que habían capturado a Ovidio Guzmán, hijo del otrora capo Joaquín “Chapo” Guzmán.
Los altos índices de criminalidad pueden limitar el crecimiento económico de México, dijo el viernes el director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI), Alejandro Werner.
Consultado en rueda de prensa sobre el clima de violencia en la ciudad mexicana de Culiacán, escenario el jueves de un ataque del crimen organizado que dejó ocho muertos, Werner destacó el “impacto económico muy importante” de la delincuencia.
“Como lo hemos indicado en otras ocasiones, estos temas institucionales, como el estado de derecho, el sistema judicial, y obviamente, los altos indices de criminalidad, son temas estructurales importantes para que la economía mexicana pueda tener una trayectoria de crecimiento más elevado”, dijo Werner.
“Claramente desde el punto de vista del bienestar de la sociedad es crucial, desde el punto de vista humano es una preocupación fundamental, y luego dentro de lo que es ya nuestro ámbito de trabajo, (el tema del crimen) obviamente también tiene un impacto económico muy importante”, agregó.
En su última “Perspectiva de la economía mundial”, publicada el martes en el marco de las reuniones anuales del FMI y el Banco Mundial, el Fondo señaló una desaceleración económica en México, con un pronóstico de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de 0,4% para este año y 1,3% para 2020, lo cual supone un empeoramiento de las previsiones con respecto al informe anterior de julio.
El personal del FMI dijo la semana pasada que “mejorar la efectividad de la aplicación de la ley y las instituciones judiciales es fundamental para fortalecer el estado de derecho” en México, según la declaración final de la revisión anual del país en el marco del Artículo IV.
La batalla campal del jueves en Culiacán, bastión del Cartel de Sinaloa, se produjo entre hombres fuertemente armados y las fuerzas de seguridad que habían capturado a Ovidio Guzmán, hijo del otrora capo Joaquín “Chapo” Guzmán, actualmente preso en Estados Unidos cumpliendo una condena de por vida por narcotráfico.
Un civil y siete soldados murieron en las balaceras, que duraron unas seis horas en varios puntos de la capital sinaloense.
El operativo, sin embargo, terminó con la liberación de Guzmán, de 28 años, en una decisión que el viernes el presidente Andrés Manuel López Obrador justificó para proteger a la población de Culiacán.