Almagro exige convocar a elecciones generales en corto plazo y liberar a un centenar de opositores presos. La oposición anunció protestas a partir del sábado
El Parlamento venezolano, de amplia mayoría opositora, acusó este jueves al presidente Nicolás Maduro de dar “un golpe de Estado”, luego de que el máximo tribunal del país asumiera las competencias del Legislativo.
“En Venezuela Nicolás Maduro dio un golpe de Estado”, denunció el presidente de la Asamblea, Julio Borges, quien rasgó ante las cámaras el fallo del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), calificándolo de “basura”.
La noche del miércoles, la Sala Constitucional del TSJ, al que la oposición acusa de servir al gobierno de Nicolás Maduro, asumió las funciones del Parlamento.
El pasado martes, el TSJ ya había asestado un golpe a la Asamblea, al retirar la inmunidad de los diputados, lo que abrió la posibilidad de enjuiciarlos incluso ante tribunales militares. Esa decisión coincidió con una reunión del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) para debatir la grave crisis política y económica del país petrolero. Pero la cita culminó sin acuerdos.
Estas medidas constituyen “los últimos golpes con que el régimen subvierte el orden constitucional del país y termina con la democracia”, señaló Luis Almagro, secretario general de la OEA en una nota oficial, donde apuntó que “aquello que hemos advertido lamentablemente se ha concretado”.
En el primer golpe diplomático, el presidente peruano, Pedro Pablo Kuczynski, retiró a su embajador en Caracas, al condenar la “ruptura de la democracia en Venezuela”.