La iniciativa busca impactar el mercado laboral, la activación económica y capacitar mano de obra local
El proyecto que crea un régimen especial, para el establecimiento de sedes en Panamá, de multinacionales de manufactura está más cerca de convertirse en ley, luego que este miércoles 5 de agosto se aprobara en segundo debate en la Asamblea Nacional.
La idea identificada por sus siglas como EMMA, pretende dar un giro y conquistar inversión extranjera en un sector que actualmente no figura entre las a que aprovecha el país.
Se combinan en la propuesta un menú de beneficios para las empresas y una lista de los objetivos favorables a la economía nacional que incluyen expectativas en la generación de empleos, impacto en la contratación de servicios y la capacitación de la mano de obra panameña.
El proyecto reúne una secuela de beneficios “fiscales, migratorios, laborales y aduaneros”, explicó a En Segundos, Tay Lin Chen , directora general de la oficina de Sedes de Empresas Multinacionales del Ministerio de Comercio e Industrias, (MICI).
“Hay una tasa menor en el impuesto sobre la renta ( 5%), para las empresas que se acojan a este régimen especial, y un visado especial para los ejecutivos de estas empresa que lleguen del extranjero”, señaló la licenciada Chen. Es decir la regularización de estos estatus migratorios podría estar terminada en cuestión de días.
A cambio el país espera que además del impacto en el empleo, que para el sector manufacturero es generalmente amplio, las empresas se enfoquen en la capacitación técnica del personal panameño que contraten. “No es secreto que nuestro país debe mejorar el nivel técnico de su mano de obra”, indica la funcionaria, “esta es una excelente oportunidad para lograrlo, incluso tenemos ya planes para lograr acuerdos con universidades”, añadió Chen.
La alta funcionaria del MICI, además reitera que la llegada de estas sedes traería efectos directos en la contratación de servicios inmobiliarios, legales, médicos, seguros, educación y otros servicios. y la ya mencionada transferencia de conocimientos y tecnología en el mercado laboral panameño.
Ahora la iniciativa debe ir a tercer debate en la Asamblea Nacional, donde los diputados debatirán acerca de la conveniencia o inconveniencia del proyecto. Una vez sea aprobado en la Asamblea y deberá ser sancionada por el Presidente de la República, para convertirse en ley.