Las autoridades estadounidenses confiscaron 1,116 millones de barriles de petróleo.
El gobierno de Donald Trump confiscó la carga de cuatro buques con combustible proveniente de Irán que buscaban llegar hasta Venezuela, confirmó este viernes el Departamento de Justicia, como parte de la campaña de Washington de presión contra el gobierno de Nicolás Maduro.
Esta operación se saldó con la incautación de 1,116 millones de barriles de petróleo, que según las autoridades estadounidenses representa la mayor confiscación de combustible iraní.
“El gobierno anunció hoy que ejecutó con éxito la orden de incautación y confiscó la carga de los cuatro buques sumando aproximadamente 1,116 millones de barriles de petróleo”, indicó en un comunicado el Departamento de Justicia.
Estados Unidos recurrió a la justicia el 2 de julio para confiscar el cargamento, como parte de la estrategia Trump contra el gobierno de Maduro en Venezuela, al que Washington no reconoce.
Los barcos afectados fueron identificados como Bella, Bering, Pandi y Luna.
Según esta demanda, el empresario iraní Mahmud Madanipur, quien presuntamente tiene vínculos con la Guardia Revolucionaria, organizó envíos para Venezuela utilizando compañías de fachada offshore y transferencias de barco a barco para evitar sanciones contra Teherán.
El gobierno de Trump también sostiene tensas relaciones con Irán después de que en 2018 Estados Unidos se retiró del acuerdo multinacional para congelar el programa nuclear de Teherán.
El diaro The Wall Street Journal informó el jueves, citando a funcionarios estadounidenses, que los buques habían sido confiscados y que estaban en camino a Houston, en Texas.
El Departamento de Justicia no dio detalles del lugar de la operación y de la fecha.
El jueves, el embajador de Irán en Venezuela dijo que los reportes de que los petroleros iraníes habían sido capturados eran “otra mentira y guerra psicológica” de Estados Unidos.
“Los barcos no son iraníes, y ni el dueño ni su bandera tienen nada que ver con Irán”, dijo Hojat Soltani en Twitter, en español.
– Un grupo de 28 países pide apoyo a la transición –
Venezuela es altamente dependiente de sus ingresos petroleros pero su producción ha caído a aproximadamente a una cuarta parte de su capacidad de 2008 y su economía ha sido devastada por seis años de recesión.
Según datos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), la producción de Venezuela en julio se situó por debajo de los 400.000 barriles diarios, un nivel equivalente al de 1934.
En medio del desplome de la industria y de las sanciones de Estados Unidos, Venezuela, que solía refinar suficiente petróleo para sus propias necesidades, debió recurrir a aliados como Irán para aliviar una desesperada escasez de combustible.
Irán ha enviado varios barcos de gasolina este año a Venezuela para ayudarle a solventar esa escasez.
El grueso de las sanciones de Estados Unidos contra Venezuela entraron en vigor tras el inicio del segundo mandato de Maduro en 2019, que Estados Unidos no reconoce por las irregularidades en las elecciones.
Este viernes un grupo de 28 países, entre ellos Estados Unidos, varios miembros del Grupo de Lima, el Grupo de Contacto Internacional, la Unión Europea y otros como Israel y Corea del Sur, emitieron una declaración conjunta pidiendo apoyo a la transición democrática en Venezuela.
El texto reitera la disposición de los países que mantienen sanciones económicas para presionar por un cambio en Venezuela a discutir el levantamiento de esas medidas.