Expertos esperan que pasen años para que la actividad retome el ritmo. Ajustes y evolución son el parámetro en Panamá
Tras cinco meses de cuarentena y restricción de actividades, la Cadena de Suministros parece una de las actividades que resultó más resistente al impacto del covid-19 en Panamá.
Más bien ha sido la resiliencia, porque, casi sin darse cuenta, las actividades de abastecimiento se han ido adaptando a la realidad de movilidad restringida, bloqueos, variaciones en los hábitos de consumo, tecnología y otras afectaciones de alcance global tras la llegada del covid 19.
El cambio ha sido efectivo, pues se sostiene en transformaciones conceptuales y adaptaciones técnicas y tecnológicas al mismo tiempo. Así la Cadena de Suministros es, quizás, una de las actividades que encara desde ahora la senda hacia su recuperación.
Ese camino sin duda será largo. En una entrevista con En Segundos, Rebeca Cáceres, presidenta de la Asociación Panameña de la Cadena de Abastecimiento (APECA), lo dejó claro: “la reducción en el emplazamiento de buques y la baja en la demanda afectan directamente la disponibilidad del transporte y los volúmenes de carga. En el caso del sector aéreo, su recuperación se dará en un periodo entre dos a cuatro años”.
Un periodo que puede resultar mayor en tanto se van extendiendo medidas como los cierres de aeropuertos, por ejemplo.
No obstante, las restricciones han forzado a la Cadena a variar su lógica de funcionamiento. “El modelo tradicional de cadena de suministro lineal se está transformando en redes de suministro digital (conocidas como DSN), donde los silos funcionales se desglosan y las organizaciones se conectan a su red de suministro completa, para permitir visibilidad, colaboración, agilidad y optimización de extremo a extremo”, indicó un estudio de la consultora Deloitte, publicado a mediados de 2020, donde analizó, globalmente, las transformaciones del sector.
Además, la digitalización de los procesos y las comunicaciones ha jugado un papel importante en la adaptación. Cáceres pone como ejemplo los estados de Nueva York y Nueva Jersey, en Estados Unidos, que han creado un portal de empleo en línea para posiciones que se han abierto en plataformas de comercio electrónico.
En Panamá, por ejemplo, los puertos han digitalizado al máximo los trámites, de manera que los tiempos que ahora se invierten en controles sanitarios no ralenticen la cadena, ahorrando, basados en las ventajas digitales.
Hasta ahora la disminución de la demanda ha reducido el movimiento en “30%”, de acuerdo a los cálculos de Edgar Urrutia, presidente de la Asociación Panameña de Agencias de Carga, gremio que aglutina a operadores logísticos en servicios de carga marítima, terrestre y aérea.
“Lo que se ha tratado de negociar con las terminales portuarias y las navieras es avanzar en los procesos de digitalización, firmas electrónicas, sellos electrónicos, para facilitar la tramitología”, describió Urrutia.
“Nuestra industria tiene que avanzar mucho más rápido sobre estos temas. Ya el Gobierno Nacional está trabajando en una plataforma digital para que podamos ir poco a poco normalizando las operaciones”, añadió el dirigente empresarial.
Para Antonio García Prieto, expresidente del Consejo Empresarial Logístico (COEL), “el movimiento de medicamentos, equipos de seguridad sanitaria, alimentos, artículos de aseo e insumos agrícolas”, han garantizado un funcionamiento de por lo menos 60% de las actividades.
Los expertos dicen que en Panamá los momentos más difíciles se vivieron entre abril y mayo. Hoy, cuando se retoma un nuevo grupo de actividades tras cinco meses de haberse decretado el cierre total en marzo de 2020, las expectativas se fijan en echar a andar el reloj de la recuperación.