La llegada de Donald Trump a la presidencia deja sembrado en la población migrante miedo e inseguridad. Al convertirse la situación migratoria como un asunto de Seguridad se reforzaron las fronteras con México
El presidente Donald Trump alcanza el sábado la marca simbólica de los 100 días al frente del gobierno, con una gestión que ya tiene un efecto preocupante para los inmigrantes en situación irregular, viviendo ahora la amenaza real de la deportación.
Trump pavimentó su camino a la Casa Blanca con un paquete de promesas que incluía la expulsión de los más de 11 millones de inmigrantes en situación irregular, independientemente de su situación familiar, y la construcción de un muro en la frontera con México.
De esa forma, la llegada de Trump a la Casa Blanca representó el sepultamiento definitivo de las ilusiones de una reforma migratoria como la que impulsaba el ex presidente Barack Obama, y marcó el inicio de lleno de una era de miedo e inseguridad para inmigrantes.
“El nuevo escenario, con arrestos sin distinción si se trata de criminales o no, es preocupante. Porque deja en situación de riesgo a toda la población migratoria”, dijo a AFP la experta Maureen Meyer, del centro de análisis WOLA, en Washington.
Como las entidades de defensa de los inmigrantes recuerdan constantemente, la inmensa máquina estadounidense de deportación ya funcionó durante el gobierno de Obama, quien incluso llegó a ser llamado ‘Deportador en Jefe’ por los activistas más críticos.