Muchas veces las personas desconocen su diagnóstico, porque no acuden a tiempo a las instalaciones de salud a realizarse un chequeo médico general para conocer su condición de salud y cuando asisten tienen declarada una diabetes crónica descontrolada.
La mala alimentación, el sedentarismo, la falta de ejercicio físico y la herencia genética, están contribuyendo al incremento de la diabetes en el país, informó, Marlene Dubois, del equipo de la Clínica de Heridas del Pie Diabético, que funciona en el centro de salud de Veranillo, en el distrito de San Miguelito, y que reinició su atención desde el lunes 10 de mayo.
La clínica está preparada con todo el personal especializado y las medidas de bioseguridad establecidas por el Ministerio de Salud (MINSA), para iniciar el registro de pacientes a las 6:00 a.m. e iniciar las curaciones a las 7:00 a.m., agregó Dubois.
Dubois comentó que esta dependencia de Salud ha sido dirigida por el Dr. Danilo Espino, por más de 15 años, y dejó de ofrecer el servicio debido al surgimiento de la pandemia provocada por el SARS-CoV.
Explicó que la prioridad se dará a pacientes que por la pandemia y seguridad de sus vidas se vieron obligados a suspender sus controles, no obstante, para ser admitidos deben presentar la orden de referencia y la prueba de hemoglobina glicosilada (HBa1c), que mide el nivel promedio de glucosa o azúcar en la sangre, con un mes anterior para verificar su condición de salud como paciente.
Solo podrá ingresar a la clínica el paciente que se va a atender con mascarilla y pantalla facial y los familiares o acompañantes deberán esperar en la parte exterior de las instalaciones.
Precisó que un estudio realizado por la Universidad de Panamá constató el incremento de casos de diabetes en jóvenes. “Antes de la pandemia teníamos casos de pacientes de 19 años de edad con una úlcera y pie diabético desarrollado, que teníamos que dar seguimiento para evitar la amputación”, remarcó.
“Muchas veces las personas desconocen su diagnóstico, porque no acuden a tiempo a las instalaciones de salud a realizarse un chequeo médico general, para conocer su condición de salud y que, lamentablemente, cuando asisten ya tienen declarada una diabetes crónica descontrolada”, comentó.
Señaló que los hijos de padres diabéticos tienen predisposición a desarrollar la enfermedad y aquellas madres que, durante el embarazo al nacer el bebé pesa más de 10 libras, se considera que tiene algún gen de diabetes.
“Hay que estar supervisando no solamente al adolescente, al anciano, al adulto mayor sino a las embarazadas, ya que ellas pueden desarrollar una diabetes gestacional que le podría declarar la patología”, advirtió.
Cuando nos alimentamos, la mayor parte se convierte en glucosa, que pasa a la corriente sanguínea para alimentar las células del cuerpo y proporcionarnos energía. Si no hay insulina, la glucosa no puede entrar en las células, acumulándose en la sangre, causando exceso de azúcar en sangre y el peligro en las personas de desarrollar diabetes.
Para la reapertura de la clínica, la Región de Salud de San Miguelito, en coordinación con el Centro de Salud de Veranillo, aplicó todas las medidas de bioseguridad recomendadas por el MINSA y para realizar las curaciones se adquirió un sillón especial en el que se colocará una almohadilla desechable por cada paciente.
