Los inversionistas que aplicaron para los beneficios del Decreto Ejecutivo No. 722, completaron exitosamente sus trámites tanto en las oficinas del MICI como del Servicio Nacional de Migración (SNM), logrando sus nuevos estatus migratorios.
Alrededor de 17 inversionistas de diferentes regiones del continente, han dado como resultado unos $10.6 millones en inversiones, a través del programa de Residencia Permanente por Razones Económicas, entre los meses de enero a agosto del presente año.
La información fue proporcionada por Daniel Yau, director general de Servicios al Inversionista del Ministerio de Comercio e Industrias (MICI), detalló un comunicado institucional, y añadió que, se espera que en los próximos días se dé la aprobación de dos nuevas certificaciones.
De acuerdo al Ministerio de Comercio e Industrias, los inversionistas que aplicaron para los beneficios del Decreto Ejecutivo No. 722, completaron exitosamente sus trámites tanto en las oficinas de la entidad, como del Servicio Nacional de Migración (SNM), logrando sus nuevos estatus migratorios.
“Los inversionistas provienen principalmente de países de Centro y Sudamérica, así como el Caribe, quienes han mostrado interés en actividades del sector inmobiliario, bancario y de valores”, precisó el director general de Servicios al Inversionista del Ministerio de Comercio e Industrias (MICI).
“La atracción de nuevas inversiones es parte del plan de acción del Presidente Laurentino Cortizo Cohen, repercutiendo positivamente en la dinamización de los sectores productivos, la generación de empleos y la transferencia de conocimientos y tecnología”, indicó el comunicado.
En octubre pasado, el Gobierno anunció el nuevo programa de Residencia Permanente por Razones Económicas para Inversionistas Calificados, con el objetivo de estimular la reactivación económica mediante la atracción de inversionistas de alto patrimonio para dinamizar distintos sectores de la economía, como el inmobiliario y la construcción.
Para aplicar a este programa, según el Decreto Ejecutivo No. 722 de 15 de octubre de 2020, “los inversionistas extranjeros deben invertir en propiedades inmobiliarias por un mínimo B/. 300,000 durante los primeros 24 meses de vigencia del decreto. Luego de este tiempo, el monto sube a B/. 500,000”.