Transportistas coincidieron en indicar que en Aguadulce no hay espacio para la operación de dos proyectos de terminales, y estimaron que el desorden imperante en el sector transporte obedece, en gran medida, a esa anómala situación.
Un grupo de transportistas de la ciudad de Aguadulce, provincia de Coclé, reiteró la necesidad de encontrar una solución definitiva al conflicto surgido con la operación de una terminal de transporte, que garantice el bienestar de la comunidad y que esté basada, exclusivamente, en las disposiciones legales vigentes.
La firme e irrevocable solicitud fue formulada durante una reunión que representantes de las prestatarias del transporte en el referido distrito coclesano llevaron a cabo con Miguel Alemán, subdirector nacional de la Autoridad de Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT).
En la cita, el subdirector Alemán fue enfático al señalar que la decisión que se adopte será conforme con las leyes vigentes que regulan el sector, y afirmó que, a juicio de la Attt, la única sociedad que inició y completó todos los requisitos exigidos para obtener una concesión administrativa que le permita operar una terminal en el mencionado distrito ha sido la Central de Transportistas de Aguadulce, S.A., propietaria de la Gran Terminal de Transporte de Aguadulce (GTA).
Los presidentes de las prestatarias del transporte, quienes asistieron a la reunión con el subdirector nacional de la ATTT, coincidieron en indicar que en Aguadulce no hay espacio para la operación de dos proyectos de terminales, y estimaron que el desorden imperante en el sector transporte obedece, en gran medida, a esa anómala situación.
Ante la interrogante de los transportistas, el subdirector Alemán dijo que las claras instrucciones del gobierno del presidente Laurentino Cortizo han sido encontrar una solución al problema existente a la luz de las normativas legales vigentes y a la procura de los mejores intereses de los transportistas y de la comunidad en general.