Guillermo Torres Díaz resaltó que el ritmo de crecimiento poblacional en la capital panameña asciende a 30 mil personas anuales y las acciones deben apuntar hacia ese objetivo.
Los ciudadanos de una nación deben tener garantizado un servicio de agua potable eficiente, que permita satisfacer sus necesidades y un buen desarrollo de sus habitantes.
Así lo expresó el secretario técnico del Consejo Nacional de Agua (Conagua), Guillermo Torres Díaz, durante su participación en el Foro La Transformación Digital de las Ciudades Resilientes, organizado por la Fundación Ciudad del Saber y la Fundación Educación Vial.
En su ponencia “Agua y Salud: equilibrio dinámico en las ciudades resilientes”, Torres Díaz dijo que cualquier plan o acción que se emprenda debe ser enfocado en la perspectiva de la población.
“Debemos estar preparados para brindarle un futuro y garantizar un buen desarrollo desde el primer momento a cada uno de nuestros habitantes. Mi perspectiva empieza desde ahí, así es como veo la transformación de las ciudades resilientes, y en función de nuestras responsabilidades como profesionales y como personas”, detalló el secretario técnico de Conagua.
Agregó que toda iniciativa en el caso de Panamá, debe ser dirigida a la perspectiva de la población, principalmente del área metropolitana que totaliza la mayor cantidad con un 1.7 millones de habitantes y que para el 2030 alcanzará 2.2 personas.
Torres Díaz resaltó que el ritmo de crecimiento poblacional en la capital panameña asciende a 30 mil personas anuales y las acciones deben apuntar hacia ese objetivo.
Entre los retos que imperan para los próximos años se encuentran: mejor planificación; mantenimiento; falta de protocolos y fallas operativas de plantas de tratamiento de agua; mayor presupuesto; la situación atmosférica; estudios y diseños en los proyectos; y calidad del agua potable.
Para alcanzar la resiliencia de las ciudades, Conagua pondera la planificación ordenada, mediante programas de modernización y desarrollo acordes a las regiones. También aumentar las capacidades de producción de agua potable (potabilizadora de Sabanitas II; Gamboa, Howard); realizar mejoras y mantenimiento continuos; continuar con el proyecto de Saneamiento (Juan Díaz, Panamá. Santiago de Veraguas. Changuinola, Bocas del Toro); y fortalecer las alianzas y la coordinación entre las instituciones responsables.