En las últimas semanas se ha producido una escalada de las tensiones en la región ante un eventual ataque ruso contra Ucrania, que según fuentes ucranianas y estadounidenses podría producirse a principios de 2022.
El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, conversó telefónicamente ayer miércoles con sus homólogos de Francia, Jean-Yves Le Drian; Alemania, Annalena Baerbock; y Reino Unido, Elizabeth Truss, sobre el aumento de la tensión en Ucrania ante los movimientos en las últimas semanas de tropas rusas en la frontera con ese país.
Así lo confirmó en un comunicado el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, quien detalló que discutieron la importancia de la “coordinación continua para disuadir cualquier agresión rusa contra Ucrania”.
Los funcionarios “afirmaron el consenso entre los aliados y socios para imponer a Rusia consecuencias masivas y costos severos por tales acciones”, apuntó la nota.
También “reafirmaron su apoyo inquebrantable a la independencia, soberanía e integridad territorial de Ucrania”.
La conversación tuvo lugar un día antes de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el de Rusia, Vladímir Putin, conversen telefónicamente.
En las últimas semanas se ha producido una escalada de las tensiones en la región ante un eventual ataque ruso contra Ucrania, que según fuentes ucranianas y estadounidenses podría producirse a principios de 2022.
Rusia ha negado estar preparándose para una ofensiva y ha manifestado que Occidente presta excesiva atención al desplazamiento de tropas dentro de las fronteras rusas.
Durante la conversación, los jefes diplomáticos también abordaron las “preocupaciones compartidas” sobre los avances en torno al programa nuclear de Irán, al advertir que se “agota el tiempo” para que Teherán regrese al pacto Jcpoa (por sus siglas en inglés).
Ese pacto, logrado en 2015 entre Irán y el 5+1 (China, EE.UU. Francia, el Reino Unido y Rusia más Alemania), tenía como objetivo limitar las actividades nucleares del país persa. Washington se retiró unilateralmente en 2018 del acuerdo y un año más tarde Teherán comenzó a saltarse los límites impuestos a su programa nuclear.
Por otra parte, los líderes diplomáticos expresaron su “solidaridad” con Lituania ante la “creciente presión política y la coerción económica” de China y rechazaron esas prácticas.
Lituania ha advertido de que sus exportaciones a China no se despachan a través de la aduana y de que se están frenando sus solicitudes de importación.
China decidió el pasado 21 de noviembre “rebajar” sus relaciones diplomáticas con Lituania al nivel de encargado de negocios como protesta por la apertura de una oficina de representación taiwanesa en Vilna.
En la llamada de este miércoles los funcionarios diplomáticos coincidieron además en la importancia de que el proceso electoral en Libia “avance sin demoras”.
El pasado 22 de diciembre, la Comisión electoral suprema de Libia propuso aplazar por un mes las elecciones presidenciales y legislativas previstas para el 24 de diciembre, tras alegar que las discrepancias entre el poder político y el judicial sobre las candidaturas hacen imposible el proceso.