El avance de un convoy militar ruso hacia Kiev quedó estancado entre las últimas 24 y 36 horas por la resistencia ucraniana y porque los rusos se estarían reagrupando y evaluando el progreso que no han logrado, dijo este miércoles el Pentágono.
“Tenemos algunos indicios, nada que podamos verificar independientemente al 100 %, pero son algunos indicios, de que los ucranianos han intentando, de hecho, ralentizar ese convoy”, apuntó el portavoz del Departamento de Defensa estadounidense, John Kirby, en una rueda de prensa.
El responsable estadounidense agregó que otro de los motivos del estancamiento de esa caravana castrense, que avanza desde el norte hacia la capital ucraniana, son “desafíos logísticos y de mantenimiento”, que los rusos no habían anticipado.
Mientras, en el sur, “parece que las fuerzas rusas están afrontando en general menos resistencia que en el norte”, indicó que portavoz.
Kirby apuntó que todavía existe una “batalla muy disputada” por la localidad ucraniana de Jersón, que Rusia asegura que ha tomado y hacia la que ha avanzado desde Crimea.
“Nos parece que los ucranianos ciertamente están luchando por esa ciudad”, señaló.
Respecto a la situación en Mariúpol, Kirby dijo que las fuerzas rusas están progresando: No obstante, “no creemos que (los rusos) estén en el centro de la ciudad, tenemos todo tipo de indicaciones de que Mariúpol será defendida”, subrayó.
El portavoz del Ministerio ruso de Defensa, Ígor Konashénkov, anunció este miércoles que las fuerzas armadas rusas habían tomado el control total de Jersón.
Más al este, en Mariúpol, a orillas del mar de Azov y en la región de Donetsk, los separatistas prorrusos apoyados por el poderío militar ruso aseguraron hoy que sus fuerzas habían bloqueado la ciudad, según los medios rusos.
No obstante, el Ministerio del Interior ucraniano aseguró que “las batallas por Mariúpol continúan”, ya que las unidades de la Guardia Nacional junto con las Fuerzas Armadas “mantienen la defensa de la ciudad”.