Tras las sanciones internacionales impuestas a Rusia a raíz de su invasión de Ucrania, el exportador de electricidad ruso InterRAO perdió la posibilidad de vender electricidad a sus clientes en los países bálticos desde este domingo.
“Se trata de un paso importante en nuestro camino hacia la independencia energética”, declaró el domingo a la AFP el ministro lituano de Energía, Dainius Kreivys.
El viernes, la Bolsa de Energía Nord Pool envío un aviso a InterRAO, advirtiéndole que se le había prohibido hacer negocios en los países bálticos a causa de las sanciones internacionales.
Desde hace años, Letonia, Lituania y Estonia buscan conseguir la independencia energética respecto de Rusia, aumentando la producción interna de electricidad y construyendo interconexiones de redes con países vecinos.
A causa de ello, las importaciones de electricidad de Rusia a Letonia y Lituania, que anteriormente eran de 1.300 megavatios-hora al año, cayeron a 300 megavatios-hora el año pasado y ahora se han interrumpido totalmente.
La última vez que Letonia importó electricidad de Rusia fue a principios de mayo, en tanto Estonia y Lituania dejaron de comprársela a Moscú este domingo.
“Al declinar importar recursos energéticos rusos, rechazamos financiar al agresor”, señaló el ministro lituano.
De toda la electricidad que Lituania importó el año pasado, el 17% provenía de Rusia.