Los resultados del CBI, al cierre de abril de 2022, demuestran que los bancos mantienen robustos indicadores de solidez financiera, principalmente los de liquidez legal (58%) y solvencia (15.46%), en casi el doble del mínimo requerido por la regulación.
La incertidumbre del contexto internacional debido a las amenazas geopolíticas no han sido impedimento para que el Centro Bancario Internacional (CBI) registre mejoras en sus resultados. Prueba de ello es que, el Informe de Actividad Bancaria (IAB), al cierre de abril de 2022, reportó una utilidad neta acumulada por el orden de USD648 millones, lo que representa un aumento de 54.6% frente al mismo período de 2021, cuando alcanzó un saldo de USD419 millones.
Este resultado se atribuye a un mejor desempeño de la mayoría de los márgenes de los ingresos extraordinarios de las entidades bancarias, el menor gasto por constitución de provisiones para pérdidas crediticias y una sostenida recuperación de los ingresos por intereses, debido a que un mayor porcentaje de clientes vienen honrando sus deudas reprogramadas.
Otro indicador que registró un incremento sostenido fue la cartera de crédito neta al alcanzar un saldo de USD77,946.3 millones, lo que representa un incremento de 9.3%, con respecto a igual periodo del año anterior, cuando sumó unos USD71,326 millones, el cual responde al impulso de las entidades bancarias a la colocación de créditos productivos y créditos de vivienda en el componente preferencial, principalmente.
En lo referente al desempeño del componente externo del portafolio de crédito, éste se incrementó en 26.3% interanual y resalta el papel clave del CBI en atender, desde Panamá, las necesidades de financiamiento de los países de América Latina y el Caribe, lo cual estimamos, puede seguir mejorando.
Este buen desempeño impactó de forma positiva al Balance y Estado de Resultado del CBI al registrar un total de activos de USD135,997.1 millones, lo que representó un aumento interanual del 5.9% o unos USD7,516.5 millones adicionales, con respecto a igual periodo de 2021, lo cual fue producto del aumento de la cartera crediticia neta y del componente de inversiones.
Otro indicador positivo fue el resultado reflejado en los depósitos captados en la plaza que registraron un total de USD98,205.1 millones, un aumento de 3.3% o unos USD3,107.2 millones adicionales, frente a igual periodo del año anterior. Si enfocamos el análisis a los depósitos internos, se registró un aumento en abril de 2022, para alcanzar USD63,438.8 millones, lo que supone un aumento de 1.64% con respecto al mes de abril 2021. Por su parte, los depósitos externos registraron un aumento de USD2,081.8 millones alcanzando un saldo de USD 34,766.3 millones.
En cuanto a las cifras de la cartera modificada, a abril de 2022, reflejaron un monto de USD6,010 millones. Los sectores con mayor migración a la cartera regular, amparada por el Acuerdo No. 4-2013, son el segmento de hogares y, otra parte importante, el sector inmobiliario.
Los resultados del CBI, al cierre de abril de 2022, demuestran que los bancos mantienen robustos indicadores de solidez financiera, principalmente los de liquidez legal (58%) y solvencia (15.46%), en casi el doble del mínimo requerido por la regulación, lo que significa que el sistema financiero panameño continúa mostrando resiliencia y una posición en general sólida, ya que se encuentra en posibilidad de apoyar el ritmo, el alcance y la robustez necesarios para la recuperación económica.